Unas 25.000 personas han huido del inestable estado del Nilo Azul, hacia Etiopía, en las últimas tres semanas por los combates entre el ejército sudanés y los rebeldes, según la agencia para los refugiados de la ONU.

“Desde el 3 de septiembre, cuando comenzó el flujo hacia Etiopía, unos 25.000 refugiados han llegado a Etiopía”, afirma Adrian Edwards, portavoz del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados, UNHCR.

“Con las hostilidades que todavía tienen lugar en el estado del Nilo Azul, esperamos que el número siga aumentando”, añadió, señalando que la semana pasada se informó de bombardeos aéreos al menos dos días, y el lunes 26 de septiembre.

Junto con otras tres agencias, la UNHCR ha emitido una petición de 18.3 millones de dólares, para ayudar a unos 35.000 refugiados, que se espera que huyan de Sudán.

Muchos han cruzado a Etiopía desde el punto fronterizo de Kurmuk, y están durmiendo al raso, en los pueblos cercanos al punto fronterizo.

Los bombardeos continúan cerca del lugar, por lo que Edwards dice que la UNHCR y el gobierno de Etiopía están intentando trasladarlos a otro lugar más seguro.

Por el momento, unas 3.000 personas han sido trasladadas al campo de Shekole, unos 50 kilómetros al sureste, mientras que el gobierno de Etiopía está construyendo dos centros de tránsito, cerca de los principales puntos fronterizos, para albergar a los nuevos refugiados que vayan llegando.

Jartum está llevando a cabo operaciones militares contra movimientos rebeldes en tres regiones separadas en las regiones de la volátil frontera con Sudán del Sur, que obtuvo su independencia el pasado 9 de julio.

El conflicto en el estado de Kurdufan Sur estalló justo un mes antes de la secesión, entre el ejército de Sudán y las milicias Nuba, que lucharon junto al SPLA, el ex ejército rebelde del Sur, durante la guerra civil del norte contra el sur, que duró décadas.

Los enfrentamientos se han extendido al estado de Nilo Azul a principios de este mes, mientras el gobierno del norte actúa para imponer su autoridad en las nuevas fronteras.

(Times Live, Suráfrica, 27-09-11)