En un informe hecho público a finales de septiembre por la Ong International Crisis Croup se reconocía a la vez la real paz religiosa en Burkina Faso y las tiranteces que van emergiendo de un tiempo a esta parte. Y aunque hoy en día nadie hace campaña política recurriendo a la religión de candidatos o electores, todos los ingredientes están reunidos para que “alguien” sea el primero en abrir la caja de Pandora. Con más de 35 etnias y lenguas, con un alto porcentaje de musulmanes (60%) y con una élite dirigente y administrativa mayoritariamente cristiana, el país está situado entre un norte con un islam cada vez más radicalizado y una banda costera en la que las iglesias pentecostales radicalizan igualmente su actitud frente al islam y el catolicismo. Aunque Burkina Faso nunca ha conocido incidentes de carácter religioso, los atentados de enero de 2016, reivindicados por Daesch, significaron un duro despertar para autoridades y ciudadanos: la violencia que se reclama de la religión les había llegado.
La parte más interesante del documento es la larga lista de recomendaciones hechas a las autoridades y a la sociedad civil, tendentes a mantener una coexistencia no sólo pacífica, sino también basada en la noción de ciudadanía, de fraternidad y de lucha contra las desigualdades. Citemos a modo de ejemplos las siguientes recomendaciones:
-Trabajar para mejorar la representación de los musulmanes en las élites políticas y administrativas, sin caer en políticas de cuotas.
– Tomar conciencia de los peligros de la mendicidad y de las escasas perspectivas de miles de alumnos de las escuelas coránicas.
– Que los líderes musulmanes trabajen con la administración para reformar la enseñanza franco-árabe, y acepten cumplir las exigencias del Estado;
– Garantizar una visibilidad equitativa de todas las confesiones religiosas en el espacio público y en especial en la radio-televisión nacional.
– Asegurar una gran difusión de ejemplos de coexistencia religiosa a través los medios de comunicación.
Fuente: lefaso.net
[José María Cantal Rivas, editor de AfroIslam]
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