En 1999 Eritrea firmó la Carta Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos, sin embargo no fue hasta 2016 cuando envió su primer informe sobre la situación de los DD.HH. en su territorio, el cual debía haber sido enviado cada dos años desde su firma. La demora ha llevado 17 años.

El informe provocó cantidad de preguntas entre los comisionarios de la Comisión Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos situada en Nuakchot, a las cuales la comisión eritrea contestó con muchas dificultades.

Las violaciones de D.DHH. y abusos por parte de las autoridades forman parte de la realidad contemporánea de Eritrea. El Gobierno ha ignorado hasta el momento todas las peticiones de la Comisión sobre visitas y quejas por violaciones de DD.HH. Las recomendaciones hechas por la Comisión han sido siempre ignoradas.

La falta del respecto del estado de derecho, la no independencia del sistema judicial, la inexistente libertad de prensa y el control sobre la sociedad civil son causa de las actuales violaciones de DD.HH. en Eritrea. Es famoso el caso de los 18 periodistas detenidos por el gobierno eritreo en 2001, los cuales todavía están en prisión.

Por lo tanto, medios de comunicación y miembros de la Comisión Africana han desconfiado de la publicación del informe eritreo ¿Cuál es el objetivo si son claras las violaciones de DD.HH. dentro de su territorio? ¿Pretende lavar su imagen o asegurar su posición ante ciertos contratos solo ofertados a los signatarios de la Carta Africana? ¿Por qué sigue siendo miembro de la Carta Africana de DD.HH. y de los pueblos cuando no cumple con sus principios básicos?

Human Rights Concern – Eritrea (HRCE)

Fuente: Asmarino Independent

[Traducción, Alejandro Álvarez Ramírez]

[Fundación Sur]

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