DE LA RUPTURA CON EL SISTEMA RENTISTA A UNA JUSTICIA SOCIAL MAYOR
La primera semana de la campaña electoral de las elecciones presidenciales no se recibió con el entusiasmo esperado. Los seis candidatos que compiten han viajado desde el 19 de marzo, siguiendo un plan bien determinado, a las cuatro regiones del país para encontrarse con los ciudadanos. Los temas tratados en los discursos de los aspirantes a la Presidencia de la República son la abstención, el tema social y la economía. En el plan económico de los programas de los diferentes candidatos encontramos una lista de soluciones para sacar al país de su adormecimiento en materia de medidas para una mejor gestión de los recursos de Argelia y del desarrollo duradero con el fin de devolver la esperanza a la mayoría de la población.
Louisa Hanoune “Únicamente una ruptura con el sistema actual puede sacar al país de la crisis”
Louisa Hanoune, secretaria general del Partido de los Trabajadores (PT) propone así, “una verdadera ruptura con las políticas y los actos precedentes que ayudará al país a salir de la crisis “. Para la candidata, la crisis actual que afecta a los países capitalistas es una prueba del fracaso de este sistema. El capitalismo ha llegado, según ella, a su fase de declive. Hanoune ha afirmado que las nuevas inyecciones de dinero de los gobiernos tienen como objetivo “salvar a los especuladores y no a las empresas productivas”. La secretaria general del PT estima que la recesión económica es una realidad. En su programa electoral, Louisa Hanoune ha subrayado la ineficacia de las reformas en el sector, que los poderes públicos se comprometieron a llevar a cabo. Insta a la población a constatar con sus propios ojos si la política que se aplica en la actualidad ha arreglado, entre otros, los problemas del desempleo y la vivienda. Hanoune habla de “una desertificación industrial del país” provocada, como lamenta ella, por la estrategia sectorial del ministro de Industria y de la Promoción de Inversiones. Asimismo ha acusado al primer responsable del departamento de la Energía y Minas de vender los recursos energéticos del país a precios bajísimos, beneficiando a los extranjeros”. Hanoune considera que el tiempo le ha dado la razón. Ya que, recuerda, ha habido una congelación en la privatización de ciertas empresas inscritas en la agenda del ministro de Industria y también en la aplicación de la ley de hidrocarburos aprobada, sin embargo, por el Parlamento. Su participación en estas elecciones tiene como objetivo, enfatiza, proporcionar al pueblo de Argelia una opción política en condiciones de evitar que el país sufra las embestidas de la crisis del sistema capitalista mundial. “Es preciso llevar a cabo una ruptura con las políticas de pillaje y desertificación industrial derivadas, en gran medida, de los acuerdos con la UE y las negociaciones con la OMC; salir definitivamente de la crisis política y de seguridad con el fin de construir las bases de la verdadera democracia con su contenido político y social”, señala. Asimismo apunta que existe un profundo deseo de romper verdaderamente con las políticas retrógradas incapaces de sacar al país del “pozo”. Volviendo a hablar del tema sobre la asociación entre Argelia y la UE y la adhesión a la OMC, subraya que su partido es el único que se opone a ello. “No estamos implicados con el FMI, el Banco Mundial, la OMC y la UE. Nosotros tenemos el valor y la osadía de oponernos y decir que no debemos entrar en la OMC ahora”, declara. Su programa electoral apuesta por una reforma política que dé paso a una verdadera reforma económica. “Mientras haya voluntad política, se pueden resolver los problemas y el PT es capaz de asumir esta responsabilidad”, explica. Por ello, Louisa Hanoune ha optado por un programa nacional de desarrollo que gira alrededor de un plan de trabajos públicos financiado por inversiones públicas. Apuesta por una verdadera reforma agraria en la que las tierras se distribuyan únicamente a los “fellah”, es decir, a los que las trabajan y viven de ellas además de una ayuda gratuita del Estado (semillas, material, abono…). La candidata se compromete a luchar contra los planes de las instituciones financieras internacionales. Con el propósito de ilustrar sus diversas posturas “económicas”, recordamos que defendió el tercer día de la campaña electoral, durante un mitin en la ciudad de Dellys, la distribución equitativa de las riquezas del país, reclamando la devolución de 140.000 millones de dólares que se encuentran en Estados Unidos y en bancos occidentales. Asimismo ha propuesto la revisión de los acuerdos internacionales firmados en Argelia y que han reportado perjuicios a los diferentes sectores económicos del país y que ha calificado de “desastre para la economía nacional”.
Moussa Touati “Instaurar una economía social justa”
El presidente del Frente Nacional Argelino (FNA), M. Moussa Touati, opta, en su programa, por fundamentar el sistema económico con “intenciones sociales”. Es decir, desea “la instauración de una economía social y justa que contribuya al menos a asegurar a los argelinos los medios de existencia necesarios para vivir dignamente”. Favorece el desarrollo de los sectores que crean riquezas y empleo. La cuestión del empleo se considera uno de los ejes centrales de su campaña. Estima que el mercado negro absorbe el 70% de los jóvenes en activo. Moussa Touati pide, asimismo, que se indemnice a los agricultores. No obstante, precisa que sólo los agricultores verdaderamente afectados por calamidades deben ser indemnizados. El objetivo que se busca mediante esto es garantizar la seguridad alimentaria a toda la población cuya principal reivindicación sigue siendo el derecho a la vida. Por otro lado, aboga por el apoyo a las empresas nacionales que movilicen una gran cantidad de mano de obra, así como por la multiplicación de pequeñas y medianas empresas. Para este candidato, la política de reforma económica ha hecho que Argelia sufra después del cierre de las empresas y el despido de los trabajadores, mientras el dinero se les ha otorgado a los extranjeros por proyectos ficticios”. Su programa quiere superar todo el negativismo que ha terminado por afectar a los diferentes sectores de la vida nacional, política, social y económica. Asimismo, han aumentado las presiones y las tentativas de los extranjeros para acaparar las riquezas del país. Subraya “la urgencia de la inversión en recursos humanos”. Por otro lado, sugiere que se reconsidere el estatus de las tierras, su acondicionamiento y la motivación a los agricultores.
Ali Fawzi Rebaïne “Por una reestructuración del sistema financiero”.
El presidente del partido AHD 54 parece ser el candidato más “brusco” del conjunto de los candidatos. Sus discursos siempre están “adornados” con constataciones poco favorecedoras de la situación socioeconómica existente en Argelia. Para acabar con las prácticas ineficaces para la economía nacional, aboga por una reestructuración verdadera del sistema financiero actual. En su programa electoral busca la refundación completa de las instituciones financieras nacionales. Asimismo, Rebaïne ha subrayado que “es preciso alejar a las instituciones de las prácticas negativas. Para conseguir esto, es importante reforzar el control con el fin de impedir las malversaciones de fondos”. Esta reforma tendrá que determinar todo el sistema económico y sus partes, sobre todo los bancos, la administración de las aduanas, el Tribunal de cuentas incluido el Consejo de la moneda y el crédito. Expresando su oposición a cualquier economía que se base en el petróleo, Rebaïne sugiere promover los sectores que crean empleo y producen riqueza. El presidente del partido AHD 54 quiere lograr una economía fuerte que se base en un desarrollo global y duradero. En su programa también se trata profundamente una distribución mejor y eficaz de la riqueza nacional y la promoción de una política de empleo eficiente para controlar mejor la “plaga” de desempleo. Ha recordado que su partido defiende la lucha contra la corrupción y el favoritismo. Al hablar de esta última irregularidad, recuerda la crisis de la vivienda que, según Rebaïne, perdurará a causa de la mala gestión y del favoritismo en la distribución. Otro sector en el que se interesa Ali Fawzi Rebaïne es el de la agricultura. Insiste en que se necesita llegar a la autosuficiencia alimentaria y acabar con la dependencia del extranjero que Argelia sufre. Para el candidato, es obligatorio llevar a cabo un cambio en las altas esferas estatales. Afirma, dispone de todos los medios financieros y humanos para “imponer un cambio y llegar a un buen gobierno”.
Abdelaziz Bouteflika “Continuar con las reformas del gobierno en todos los aspectos”
Abdelaziz Bouteflika se compromete a “continuar con los procedimientos de reforma del gobierno en todos los aspectos y la consolidación de la autoridad de la ley”. Ciertamente, nos hemos comprometido a realizar reformas estructurales con el fin de reestablecer y reforzar la autoridad del Estado pero es necesario acabar con los problemas de los que son víctimas los ciudadanos”. El tercer compromiso del candidato está relacionado con “la continuidad del esfuerzo intenso del desarrollo económico y social”. De este modo el candidato asegura que movilizará de mejor modo los ingresos del país al servicio del desarrollo de la nación”, que promete aumentar a 150.000 millones de dólares en los próximos cinco años. En cuarto lugar, Bouteflika está decidido “a erradicar la crisis de la vivienda al reforzar, por diversos medios, el desarrollo de la promoción inmobiliaria y las capacidades de los ciudadanos para acceder a su propia casa”. También espera crear 3 millones de empleos. Por otro lado, y promocionando la inversión extranjera sobre la base de una ganancia compartida, el candidato asegura “sostener la reactivación del sector económico público apoyando las capacidades nacionales de inversión y de creación de riquezas”. Cuenta con “hacer progresar el crecimiento económico invirtiendo más en los medios necesarios para la creación de riquezas diferentes a los hidrocarburos”.
Mohamed Saïd “Diversificar los ingresos del país para prepararlo para el momento “post-petróleo”
“Una reactivación económica que vaya sustituyendo la economía rentista”. Este es el credo de otro de los candidatos a la Presidencia, Mohamed Saïd. Esta transformación precisa, según él, “una nueva política con etapas y objetivos específicos y una visión global y firme”. También él hace referencia en su programa a la refundición del sistema monetario y fiscal, introduciendo más transparencia y flexibilidad en la gestión. Mohamed Saïd lamenta el fenómeno de la corrupción que continúa corroyendo el país. Asimismo subraya “el fracaso de las instituciones estatales para constituir un servicio para el ciudadano”. Para él, el dinero del Estado se malgasta y despilfarra sin el más mínimo control”. El candidato piensa ya en lo que ocurrirá cuando la economía no pueda sustentarse en el petróleo Por ello, considera que la solución reside en la diversificación de las fuentes de los ingresos nacionales para reducir la dependencia de los hidrocarburos. Esto implica, de manera imperativa, la creación de todas las condiciones necesarias para la promoción de las exportaciones que no sean hidrocarburos y la realización de la seguridad alimentaria con el fin de garantizar un desarrollo duradero. Mohamed Saïd promete un desarrollo estratégico de la agricultura que tenga como una de las bases la preparación de una nueva generación de jóvenes que mejoren el rendimiento de los agricultores. Del mismo modo, es preciso desarrollar la agricultura de las montañas y del Sur. Por consiguiente, el candidato propone la construcción de un mayor número de presas con el fin de reducir los efectos de la sequía y conceder préstamos con intereses accesibles a los agricultores. Sugiere promover, por otro lado, la investigación científica para mejorar la calidad de las semillas y modernizar los medios de producción. Diversificar los recursos del país implica el desarrollo de la agricultura y la pesca. La otra preocupación del candidato es la mejora del rendimiento de la fiscalidad mediante un mejor control de las actividades del mercado negro. La reactivación y la promoción de los sectores turístico e industrial son armas que es preciso explotar para acabar con la dependencia del petróleo. Mohamed Saïd aspira también a la implementación de mecanismos de regulación para estimular las inversiones nacionales y extranjeras, intentando conciliar el interés nacional y la garantía de los movimientos de capital. El programa de Mohamed Saïd expone de igual modo otras medidas entre las que se encuentran la creación de una caja nacional de fianzas de alquiler de habitaciones, la congelación de todo aumento de los precios de la electricidad, el agua y los hidrocarburos entre otras.
Djahid Younsi. “La creación de pequeñas y medianas empresas, una de las prioridades”
En el programa electoral del candidato Djahid Younsi se pueden encontrar numerosas prioridades. Indica la necesidad que tiene Argelia de crear una economía independiente de los hidrocarburos. “Es hora de construir una economía que no se fundamente exclusivamente en los ingresos de los hidrocarburos que representan un 98% de los ingresos de Argelia en divisas”, apunta. Para él, “el gobierno sufre un déficit real de eficacia, debido a la dispersión de esfuerzos en estrategias “dispersas”, lamenta. Estima que las cifras del gobierno sobre las tasas de paro en nuestro país no se aproximan a la realidad. Su programa económico se basa en el liberalismo. Aspira a instaurar un “régimen económico diversificado para salir del círculo vicioso de la economía rentista mediante la liberalización de las actividades económicas de las trabas burocráticas y tratando el fenómeno de la economía paralela”. Para el candidato, la crisis financiera y la caída del precio del barril de petróleo pueden incidir negativamente sobre el país. Propone, en cuanto a ello, apoyarse en las pequeñas y medianas empresas. En efecto, en el plan económico de su programa electoral de 25 páginas, Djahid Younis quiere crear decenas de miles, incluso cientos de miles de “canteras” de empresas con un mejor acceso a los créditos bancarios. Para ello es necesario desarrollar el espíritu emprendedor de los jóvenes. Su programa electoral asimismo aborda la creación de un sistema de gestión de los créditos industriales que sea flexible con el objetivo de favorecer la inversión y la creación de una industria competente. En ese sentido, la política de inversión de Djahid Younsi aspira a luchar sin piedad contra ciertas prácticas burocráticas que a menudo han hecho fracasar numerosos proyectos y han disuadido a muchos inversores extranjeros y nacionales. Younsi tampoco se olvida del mercado negro y propone encontrar soluciones radicales a este fenómeno. Considera prioritaria la necesidad de reformar el sector económico público para solucionar la problemática controvertida de la deuda de las empresas públicas, pero también pide la introducción de normas de gestión transparentes que determinen las responsabilidades de unos y otros. Además de estas medidas, Younsi opta abiertamente por la protección de la producción nacional contra la competencia desleal. El programa del candidato, que hace de la seguridad alimentaria del país la primera de sus prioridades, otorga importancia a la preservación de las tierras agrícolas y al apoyo a los agricultores mediante la subvención de los precios de las semillas y los abonos.
Por Badreddine Khris
Publicado en el diario Liberte, de Argelia, el 26 de marzo de 2009.
Traducido por Laura Betancort, alumna de la Universidad Pontificia Comillas de Madrid Traducción /Interpretación, colaboradora en la traducción de algunos artículos.
