La jefa de la misión de la ONU conocida como MONUSCO, Leila Zerrougui, confirmó que Kinshasa solicitó el apoyo del personal de paz para que se «derrote» a los rebeldes hutu de las FDLR (Fuerzas de Liberación Democrática de Ruanda) que se encontraban en una provincia oriental cerca de la frontera con Ruanda. Las FDLR han llevado ya ataques transfronterizos contra las fuerzas ruandesas desde las bases de retaguardia en la República Democrática del Congo (RDC). Zerrougui afirmó que la misión de paz de la ONU elogió la cooperación de Kinshasa y se pasó notificación a las autoridades ruandesas.

En su solicitud, el ministro de Defensa de la República Democrática del Congo, Crispin Atama Thabe, comunicó que las brigadas rebeldes se habían trasladado de Kivu Norte a Kivu Sur, donde podrían unirse a las operaciones de otro grupo rebelde en Ruanda. Thabe resña que la RDC “no puede aceptar ser utilizada como base para un movimiento rebelde extranjero contra uno de sus vecinos”. Esta misiva ha sido compartida en las redes sociales y con la prensa local. El ministro no dio detalles sobre el tipo de ayuda que el gobierno le estaba pidiendo a los encargados de mantener la paz en la ONU.

El gobierno de la RDC informó que había extraditado a dos comandantes rebeldes de las FDLR a Ruanda como parte de un acuerdo legal. Uno de los dos hombres extraditados fue Bazeye Fils La Forge, un portavoz de las FDLR. El FDLR ha estado luchando en el este de la RDC durante décadas.

Fuente: News24

[Traducción y edición, Sara Gil Martín-Serrano]

[Fundación Sur]

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