El presidente Tshisekedi apunta a las empresas mineras para controlar el desempleo en la RDC, por Lázaro Bustince

3/05/2024 | Bitácora africana, Crónicas y reportajes

El presidente de la República Democrática del Congo (RDC), Félix Tshisekedi, ha estado hablando en términos ambiciosos últimamente. Quiere crear unos 6,4 millones de puestos de trabajo durante su segundo mandato; es decir, alrededor de 1,3 millones de puestos de trabajo al año.

Y está recurriendo a la minería, la mayor exportación del país. Se estima que el valor de los minerales sin explotar del país es de 24 billones de dólares y podría crear enormes empleos si los metales no son robados.

La inspiración, o el desafío, proviene de pálidas figuras de sus propios ministerios de Trabajo, así como del Banco Mundial. Se estima que siete de cada diez jóvenes congoleños que abandonan la universidad no pueden encontrar trabajo y la tasa de desempleo juvenil (entre 15 y 24 años) es del 35 %. La mayoría de quienes encuentran trabajo terminan en la agricultura, la administración pública o el sector informal, según muestran los datos, aunque algunos comentaristas sociales han argumentado que la tasa podría ser peor, dados los problemas de seguridad de la RDC.

El presidente Tshisekedi primero debe gestionar mejor los minerales y reducir la explotación por parte de empresas extranjeras. Cuando llegó al poder, Tshisekedi se comprometió a crear una clase media en el país, que es una de las cinco naciones más pobres del mundo, según el Banco Mundial. Su estrategia ahora es imponer la subcontratación congoleña, como exige la ley, para crear riqueza en torno a las florecientes actividades de las empresas mineras. La RDC busca seguir el ejemplo de Nigeria, que otorgará licencias mineras solo a empresas procesadoras locales.

La Autorité de régulation de la sous-traitance dans le secteur privé (ARSP), el regulador minero congoleño, es la institución encargada de implementar la estrategia del ejecutivo. En enero, el director general de la ARSP, Miguel Katemb, tomó valientemente medidas para obligar a la empresa minera de oro Kibali Gold a cumplir la ley.

En febrero de este año, Kibali Gold y la ARSP casi llegaron a las manos por un informe de los investigadores de la ARSP, que incluían a la empresa, una empresa conjunta entre la firma canadiense Barrick y la sudafricana Anglo Gold, y a la empresa estatal congoleña Sokimo, como una de las empresas mineras que habían violado la legislación sobre subcontratación en la provincia de Haut-Uéle, en el noreste de la RDC.

A finales de febrero, ARSP y Kibali Gold del Grupo Barrick finalmente firmaron un documento que puso fin a las disputas derivadas de las conclusiones de la misión ARSP sobre el cumplimiento de las normas de la ley de subcontratación. Miguel Katemb declaró:

«Hemos firmado este acuerdo transaccional, que estipula que los 394 contratos deben permanecer en la RDC, y pedimos a nuestra gente que tenga confianza en el jefe de Estado, y no es la ARSP la que va a publicar las invitaciones a licitar, sino Kibali los publicará en el sitio web de la ARSP y, junto con la Federación Congoleña de Empresas, también ayudaremos a Kibali a hacer una selección”.

Cyril Mutombo, director general de Kibali Gold Mine, que afirma haber invertido un total de 4.400 millones de dólares en la RDC desde 2009, reconoció:

De nosotros depende aceptar nuestros errores y corregirlos. La lucha del director general Katemb es noble y debemos apoyarlo porque está en consonancia con la visión del jefe de Estado”.

El protocolo firmado por Kibali y la ARSP ha abierto oportunidades de mercado a los empresarios locales, mercados que antes estaban en manos principalmente de empresas no congoleñas.

Si estos contratos se cumplen y se gestionan con responsabilidad y ética social, sin monopolios empresariales de los gobernantes, supondrá un gran paso hacia adelante en la justicia social y la promoción del bien común.

Lázaro Bustince

CIDAF-UCM

Autor

  • Bustince Sola, Lázaro

    Nacido en Izco (Navarra), en 1942, estudió filosofía en Pamplona (1961-1964). Hizo el noviciado en Gap – Grenoble (1964-1965), con los Misioneros de África (Padres Blancos). Estudió Teología en el instituto M.I.L. de Londres, (1965-1969), siendo ordenado sacerdote en Logroño, en los Padres Blancos en 1969.

    Comenzó su actividad misionera en África en 1969, siendo enviado a la diócesis de Hoima en Uganda, donde estuvo trabajando en la educación, desarrollo y formación de líderes durante nueve años. Luego vivió un periodo de trece años en diversas ciudades europeas, trabajando en la educación y capacitación de los jóvenes (Barcelona 1979-1983)) , en Irlanda como responsable de la formación de los candidatos polacos (1983-1985), y en Polonia donde fue Rector del Primer Ciclo de Filosofía Polaco (1985-1991), y se doctoró en Teología espiritual en Lublin, donde fue nombrado profesor de la misma Universidad Católica de Lublin (KUL), de dicha ciudad, en 1991.

    Regresó a Uganda en 1992, y fue elegido Provincial de los padres Blancos de Uganda hasta 1999. Durante este periodo, fue también presidente de la Asociación de Religiosas-os en Uganda (ARU), y pionero en la construcción del Centro Nacional de Formación Continua (USFC). Además inició la Comisión de Justicia, Paz e Integridad de la Creación (JPIC) en 1994, trabajando en la formación de líderes en JPIC.

    En 2000 y 2004 cursó estudios sobre educación en Justicia, Paz, y Transformación de Conflictos, en Dublín. Desde su regreso a Uganda, fue pionero en la capacitación de agentes sociales en JPIC, y en el establecimiento del primer Consorcio de Educación Ética (JPIIJPC), lanzado por seis Congregaciones Misioneras, en 2006. Desde el inicio, y hasta junio 2011, ostentó el cargo de primer Director del Instituto. Al mismo tiempo fue profesor invitado de Ética en la Universidad de los Mártires de Uganda (UMU).

    En septiembre de 2011 fue nombrado director general de África Fundación Sur (AFS), organismo que dejó de existir en 2021. En la actualidad sigue trabajando por África al 100 % siendo, entre otras ocupaciones, editorialista en el CIDAF-UCM.

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