La noche del pasado lunes 24 de enero, la Oficina Nacional de Gestión de Riesgos y Desastres (BNGRC por sus siglas en inglés) ordenó evacuar a los habitantes de la Ciudad Alta de Antananarivo ante un deslizamiento de tierra bajo la Catedral de Andohalo.

Ante el riesgo inminente de desprendimientos, más de 11 distritos de la capital tuvieron que ser desalojados por las fuerzas de seguridad del país. Además, la BNGRC tuvo que emitir otro aviso para evacuar a la población de varios barrios de baja altitud, situados en las inmediaciones de los ríos Ikopa, Sisaony y Mamba. Además, el aumento del nivel del agua ha provocado que muchos arrozales quedaran prácticamente inundados, estropeando todos los cultivos.

De acuerdo con la información proporcionada por Mandimbisoa R., del diario digital Tribune Madagascar, el día 26 de enero, miércoles, fueron publicados los datos relativos al número de personas que han podido regresar a sus casas desde los albergues de emergencia que habían sido creados como consecuencia de las inundaciones que afectaron a todo el país el pasado 18 de enero. De esta forma, según la BNGRC, más de 20.000 personas han podido regresar a sus domicilios procedentes de 40 albergues, mientras que aún permanecen 55.859 personas distribuidas entre 90 albergues de emergencia. Concretamente, las inundaciones obligaron a desplazarse a estos refugios de emergencia a 71.781 personas desde 16.919 hogares sólo en Antananarivo, ascendiendo la cifra total a 110.394 personas de 24.050 hogares en todo el país.

Si bien en los últimos dos días ha bajado considerablemente el nivel de los ríos Ikopa, Mamba y Sisaony, las regiones por las que pasan aún se hallan en alerta roja. Asimismo, ha habido que lamentar un total de 41 fallecimientos como consecuencia de las inundaciones, 32 de ellos en la región de Analamanga. No obstante, se da la circunstancia de que ciertas muertes en determinados distritos o regiones no han sido contabilizados por la BNGRC, como en Itasy, Mananjary o Fianarantsoa.

En las últimas 48 horas, el nivel del agua ha disminuido considerablemente, al igual que el cauce de los principales ríos que atraviesan la capital. En cualquier caso, las localidades atravesadas por estos tres ríos todavía se mantienen en el máximo nivel de vigilancia y continúan las operaciones de retirada de las aguas en la capital y sus alrededores.

Fuente: Madagascar Tribune - Madagascar Tribune - Mandimbisoa R. - Tribune Madagascar

[Traducción y edición, Alaitz Saez Suarez]

[CIDAF - UCM]

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