Para relanzar y fortalecer la asociación estratégica entre la Unión Europea y sus vecinos africanos, la Comisión Europea y el Alto Representante para la Unión aprobaron, el nueve de febrero, una comunicación conjunta que propone una nueva ambiciosa e innovadora agenda para el Mediterráneo.
«Esta nueva agenda se basa en la convicción de que a través de la cooperación y la asociación, los desafíos comunes pueden transformarse en oportunidades que hay que aprovechar, en el interés mutuo de la UE y los países vecinos del sur«.
Otras políticas para conseguir la prosperidad en el mediterráneo son los Acuerdos de Asociación de la UE con cada uno de los países de la región, así como la Política Europea de Vecindad (PEV) creada en 2007 y revisada en 2015. Lamentablemente estas iniciativas no han podido asegurar la estabilidad en muchos países vecinos africanos ni conseguir el nivel de cooperación esperado.
La Unión Europea quiere construir una nueva asociación a partir de los escombros de iniciativas antiguas que no han mejorado la situación política, económica y social de los países africanos. No hay más que ver a países como Libia, Siria, Egipto, Palestina o el Sáhara Occidental, todos están atravesando dificultades.
Esta nueva estrategia «incluye un plan económico y de inversiones destinado a estimular la recuperación socioeconómica a largo plazo en los países de África. Bajo el nuevo instrumento de Vecindad de la UE, hasta siete mil millones de euros se asignarán a su aplicación para el período 2021-2027, lo que podría movilizar hasta 30.000 millones de euros de inversión privada y pública en la región durante la próxima década«.
Según Josep Borrell, Alto Representante de la Unión:
«Esta comunicación transmite un mensaje crucial sobre la importancia que le damos a nuestros vecinos africanos. Una asociación mediterránea sigue siendo un imperativo estratégico para la Unión Europea. Veinticinco años después de la Declaración de Barcelona y diez años después de la Primavera Árabe, los desafíos en el Mediterráneo, muchos de los cuales se derivan de las tendencias globales, siguen siendo considerables. Para hacer frente a estos desafíos debemos renovar nuestros esfuerzos y actuar en estrecha cooperación, como socios en nuestro interés común. Este es el objetivo que persigue esta nueva agenda […] Estamos decididos a trabajar con nuestros socios del Sur en una nueva agenda que se centrará en las personas, especialmente en las mujeres y los jóvenes, para ayudarles a hacer realidad sus esperanzas para el futuro«.
La nueva agenda se centra en tres áreas de acción: desarrollo humano, buena gobernanza y estado de derecho. La UE ha declarado que en 2024 se revisará esta propuesta. Al abordar cuestiones como la democratización de los países, los derechos humanos y la posibilidad de ofrecer algo más que materia prima, la UE ha dado un paso en una nueva dirección.
Fuente: El Watan
[Traducción y Edición, Isabel Garrido Celada]
[Fundación Sur]
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