Al menos 19 personas murieron el sábado pasado cuando una bomba colocada sobre el cuerpo de una niña de diez años explotó en un concurrido mercado de Maiduguri, una gran ciudad en el noreste de Nigeria. Un ataque que Boko Haram, que ha asolado la región podría ser la causa.
De acuerdo con fuentes policiales, otra explosión mortal tuvo lugar, también el sábado, en Potiskum, a un centenar de kilómetros al oeste de Maiduguri (estado de Borno), al menos un policía murió el en la explosión de un coche a la entrada de una estación de policía.
Estos ataques se producen una semana después de otro ataque mortal de Boko Haram contra el pueblo de pescadores de Baga en el estado de Borno (norte), tal vez el más sangriento de los llevados a cabo, durante seis años, por el grupo islamista.
20 personas murieron el sábado en Maiduguri, incluyendo a la niña portadora de la bomba y 18 resultaron heridos, según declaraciones del portavoz de la policía del estado de Borno, Gedeón Jubrin.
Alrededor de las 12,40, una poderosa explosión sacudió el «Monday Market» en un momento en el que estaba repleto de vendedores y clientes.
A finales de 2014, este mercado ya había sufrido dos ataques mortales cometidos por mujeres que también usaron explosivos.
Hasta el momento nadie ha revindicado el atentado. Pero desde hace ya seis años el grupo rebelde Boko Haram ha incrementado la utilización de mujeres y niñas para sus ataques.
Según Ashiru Mustapha, miembro de un grupo local de auto defensa, la bomba explotó mientras la niña estaba siendo buscado en la entrada del mercado. Se duda de si se trata de un acto deliberado por parte de la niña pero ésta tenía unos diez años, y se duda de que realmente supiera lo que estaba atado a su cuerpo.
«De hecho a la niña se la controló a la entrada del mercado y el detector de metales detectó que llevaba algo en el cuerpo. Por desgracia, la carga fue detonada antes de que la niña hubiera podido ser aislada», explicó Ashiru Mustapha.
Inmediatamente se estableció un perímetro de seguridad alrededor del mercado, mientras que personal sanitario examinaba los escombros y buscaban heridos y restos humanos restos humanos.
«Hasta el momento, hemos evacuado 10 cuerpos al depósito de cadáveres del hospital del estado de Borno”, comentó a la prensa un miembro de la Cruz Roja, que prefirió permanecer en el anonimato. Muchas de las víctimas tienen lesiones mortales o muy graves.
«La explosión cortó el cuerpo de la atacante suicida en dos, proyectando una parte del cuerpo al otro lado de la calle», declaró Abubakar Bakura, que asistió a la escena.
Entre los muertos figuran dos miembros de los grupos de autodefensa que estaban buscando a la niña. “Estoy bastante seguro de que la bomba fue activada a distancia», declaró un testigo de los hechos.
Reclutamiento de niños
Boko Haram llevó a cabo su primer «ataque suicida», con una mujer, en junio de 2014 en el estado de Gombe (norte). Desde entonces, ha habido una ola de atentados con bomba (4 en una sola semana en Kano).
En julio, una niña de 10 años fue descubierta, en el estado de Katsina, con un chaleco cargado de explosivos, lo que hace pensar que Boko Haram obliga a los niños a inmolarse.
El reclutamiento forzoso de jóvenes y niños por parte de Boko Haram se ha convertido ahora en una práctica. En julio pasado, tres «presuntos reclutadores» fueron arrestados.
Por otro lado, el pasado sábado 3 de enero en un gran ataque, la ciudad estratégica de Baga y 16 campamentos en las proximidades del lago Chad quedaron reducidos a cenizas, provocando la huida de más de 20.000 habitantes.
Yanaye Grema, un pescador miembro de una milicia de autodefensa cuenta a la prensa como a lo largo de unos cinco kilómetros, no ha dejado de caminar sobre cadáveres, hasta que llegó a la aldea de Malam Karanti, que también estaba abandonada y quemada.
Boko Haram parece controlar las tres fronteras del estado de Borno con Níger, Chad y Camerún, así como decenas de pueblos y aldeas en el estado de Borno y en los estados vecinos de Yobe y Adamawa.
El viernes combatientes de Boko Haram también se enfrentaron con fuerzas nigerianas en Damaturu, ciudad al noreste del país, en lo que parecía ser una represalia después de una incursión del ejército del país contra un bastión del grupo islamista.
[Fuente: slateafrique.com-Fundación Sur]