Un hijo del líder libio Muhammad Gadafi, que es considerado como un posible sucesor de su padre, ha acusado al gobierno de Libia de ineptitud, destacando las divisiones entre la élite en el poder del país exportador de petróleo.
Saif al Islam Gadafi lidera una corriente reformista en Libia, que está enfrascada en una lucha de influencias con la vieja guardia, entre la que hay figuras importantes dentro del séquito de su propio padre.
Saif al Islam, que atacó al gobierno tras visitar el pabellón de Libia en la Expo Mundial, una feria internacional, en la ciudad china de Shanghái, no ocupa ningún puesto oficial y ha declarado que se encargó personalmente de supervisar la exhibición en la Expo, porque el gobierno “no tuvo interés en hacerlo”.
“El gobierno de Libia ni siquiera se molestó en mandar a un empleado subalterno para asistir al día de Libia, en la exhibición”, declaró a los periodistas. “Eso demuestra que no hay estado en Libia”. “He sido yo quien ha acordado la participación de Libia en la feria de Shanghái, porque el estado de Libia ni siquiera dio el suficiente apoyo para que el país participase” y añadió que la participación de Libia en la feria de Shanghái es la “más débil y la peor”.
Libia, que tiene las reservas probadas más grandes de petróleo de África, ha estado liderada por Muhammad Gadafi durante más de 40 años, más que ningún otro líder vivo del continente.
Saif al Islam, tuvo un rol crucial en las negociaciones para terminar con las sanciones contra Libia, después de que el país renunciase a su programa nuclear, y desde entonces ha estado presionando e influyendo para que el país se modernice.
Muchos analistas dicen que es el candidato más probable a ser el nuevo líder de Libia, pero que para asegurar el poder, primero debe hacer frente a los conservadores dentro del gobierno, el ejército y los servicios de inteligencia.
(News 24, 30-09-10)