Un general retirado oriundo de una región del norte de Nigeria, donde la mayoría de la población es de religión musulmana y que fue decisivo en la transición del régimen militar a la democracia en 1999, podría ser la carta a jugar por el presidente Goodluck Jonathan que enfrenta críticas crecientes en el interior de su propio partido.
Según informan el Premium Times y otros periódicos de Nigeria, Aliyu Mohammed Gusau fue nombrado ministro de Defensa por el jefe de estado. Junto a otros destacados políticos del norte del país como parte de la reorganización del gabinete, como el embajador en China Aminu Wali y el diputado Mohammed Wakil, deberá recibir ahora la aprobación parlamentaria. Gusau, que ya fue consejero de seguridad nacional y es cercano al ex-presidente Olusegun Obasanjo, tomaría el puesto de un ministro oriundo del sur petrolero y predominantemente cristiano. Se trata de un cargo fundamental en una fase de ofensiva del ejército contra el grupo armado Boko Haram en el noreste del país.
El general retirado, por su parte, podría ayudar a Jonathan a reconquistar sectores de su partido, el Peoples Democratic Party (PDP) que critican su gestión a la que acusan de haber favorecido sorbe todo al sur del país. El PDP gobierna Nigeria desde 1999. Las diferencias internas surgieron en el partido y desembocaron en una fractura el año pasado, ante la posibilidad de que Jonathan decida volver a presentar su candidatura para un nuevo mandato en el 2015. Los disidentes afirman que de ese modo el presidente, oriundo del sur, violaría un acuerdo interno del partido que establece una alternancia en el gobierno de personalidades de diferentes orígenes regionales, étnicas y religiosas.
MISNA