El florecimiento de los movimientos sociopolíticos entre los años sesenta y noventa en los Estados Unidos y en Sudáfrica estableció los firmes cimientos sobre los que, con una fuerza e ímpetu sin precedentes, se forjó el teatro negro de estos años. Forma y contenido surgieron a la par del compromiso político y artístico adoptado por estos artistas contra el imperialismo, el colonialismo y el racismo occidentales. Por primera vez en la historia, el teatro negro de los Estados Unidos y de Sudáfrica analizaba y valoraba las raíces negras para poder iluminar la búsqueda de un futura de libertad. Sin embargo, el contexto sociopolítico y circunstancias específicas de cada país han generado igualmente los rasgos distintivos del teatro afronorteamericano y negro sudafricano (incluyendo diferencias de género) manifiestos en ramificaciones artísticas totalmente heterogéneas y únicas.
La paz mundial, por Lázaro Bustince
El inicio de cada año está dedicado a reflexionar y trabajar por la paz mundial. Aunque la realidad diaria nos muestre que las guerras, el gasto militar y la violencia van aumentando por todo el globo, no podemos aceptar este camino hacia la destrucción y hacia la...