La masacre de Bentiu es la confirmación más reciente de que se está agravando el conflicto armado en Sudán del Sur antes de la llegada de la temporada de lluvias, según indicaron a la MISNA fuentes de la ONU que están convencidas de que en las próximas semanas ambas partes tratarán de fortalecer al máximo sus posiciones.
“Desde ahora hasta mayo, los caminos se estarán intransitables, y tanto el ejército como los rebeldes están intensificando sus esfuerzos para ganar tanto terreno como sea posible” señalaron las fuentes. Se informó que hubo combates en los tres estados del norte y el noreste. “Los rebeldes vinculados al ex vicepresidente Riek Machar están prevaleciendo en Unidad, mientras que en el Alto Nilo y Jonglei la situación parece estar más equilibrada” dijeron a la MISNA.
Por lo demás, las fuentes indicaron que en todas partes la situación se rige por equilibrios muy precarios. Las tropas que envió Uganda poco después del inicio del conflicto armado en diciembre serían cruciales para garantizar la seguridad de la capital, Juba, y de Bor, la ciudad más importante de Jonglei.
Lo que también alimenta la incertidumbre son los retrasos en el despliegue del contingente africano que prometió la Autoridad Intergubernamental para el Desarrollo (IGAD) para mediados de abril. “La IGAD no cuenta con los recursos financieros necesarios para dirigir la misión y el gobierno sursudanés no quiere que las tropas pasen a estar bajo el mando de la ONU” dijeron las fuentes.
En Sudán del Sur, las Naciones Unidas están presentes con la misión de paz UNMISS, que cuenta con 6.800 hombres. En cambio, las tropas ugandesas, que apoyan al ejército sursudanés en Juba y Bor, operan por fuera del mandato de la ONU. “La hipótesis de su despliegue en el norte, en la región petrolera de Unidad, se topa con la resistencia de Sudán, ya que Jartum, por razones históricas, se opone a la presencia de fuerzas ugandesas cerca de sus fronteras” dijeron las fuentes.
También se postergaron para el lunes 28 de abril las negociaciones de paz entre el gobierno sursudanés y los rebeldes de Riek Machar, que se iban a realizar en Adís Abeba. Según anunció el ministro de Información Michael Makuei, los mediadores decidieron postergar para poder realizar “nuevas consultas”.
MISNA
