El grupo petrolero anglo-holandés Shell ha informado el día 3 de marzo de una ataque a una de sus estaciones en el sur de Nigeria, pero ha añadido que las instalaciones no estaban produciendo en el momento del incidente.
“Confirmamos los daños por explosivos en parte de la estación de flujo de Kokoli, pero no había personal en las instalaciones y no se estaba produciendo en ese momento”, declaró el portavoz de Shell, Precious Okolobo.
Los medios locales informan de un grupo desconocido hasta el momento que se hace llamar La Fuerza Revolucionaria Patriótica del Pueblo, que ha reivindicado el ataque.
El grupo que afirma que es afiliado de Consejo Revolucionario Conjunto, JRC, ha declarado que ha volado con éxito las instalaciones de la estación de flujo de Shell, situadas en el estado del Delta, al sur de Nigeria, como señal de la “reanudación de nuevas hostilidades en el Delta del Níger y más allá”.
El grupo pidió a Shell y a otras compañías petroleras extrajeras que abandonen la región inmediatamente.
El mes pasado, el JRC aseguró que había atacado “con éxito, dejando inservible la línea troncal del oleoducto de Shell en el pantano de Obunoma”, en el estado de Rivers, pero Shell negó el ataque.
El JRC asegura que es un grupo distinto del grupo armado más importante de la región, el Movimiento para la Emancipación del Delta del Níger, MEND, que el mes pasado suspendió el acuerdo alcanzado tres meses antes con el gobierno.
Una de las principales demandas de los militantes es que las comunidades locales se beneficien de la riqueza petrolera de la región.
En el punto más álgido de la inestabilidad en la región, la producción diaria de Nigeria se redujo en un tercio, descendiendo de 2.6 millones de barriles de petróleo al día, a 1.5 millones.
La principal fuente de riqueza de Nigeria es el petróleo, suponiendo el 95 % de sus ingresos por exportaciones y el 85 % de su presupuesto.
(News 24, 03-03-10)