Greenpeace África, el grupo de defensa del medioambiente, ha expresado su consternación por la negativa del gobierno de Suráfrica a darles acceso a un informe sobre la preparación del país para desarrollar la energía nuclear. La solicitud del grupo bajo el Acta de Promoción del Acceso a la Información, PAIA, para consultar el informe sobre la preparación de Suráfrica para desarrollar una nueva planta de energía nuclear ha sido rechazada por el Departamento de Energía. Esta decisión deniega a los surafricanos su derecho básico a la información que tendrá un impacto sobre su futuro, ha declarado Greenpeace.
Se supone que el Acta, PAIA, es una ley que obliga por la constitución a hacer del derecho a acceder a la información una realidad para los ciudadanos de a pié, protegiendo por lo tanto su derechos humanos básicos y la democracia. Greenpeace dice que el informe sobre la preparación debería ser hecho público ya que es el interés de todos los surafricanos saber si Suráfrica es capaz o no de desarrollar una planta de energía nuclear de 9600 MW. El activista de Greenpeace, Ferrial Adam, dice que su organización seguirá retando la falta de transparencia y el secretismo en el desarrollo de energía nuclear en Suráfrica. “No permitiremos que la nueva planta nuclear se desarrolle bajo un velo de secretismo y falta de transparencia, utilizando el dinero de los contribuyentes”, advirtió Adam.
Recordemos que desde mediados de los años 80, Suráfrica cuenta con una planta nuclear en Koeberg, 30 kilómetros al norte de Ciudad del Cabo, con una capacidad de 1.800 MW, siendo la única del país y del continente.
Desde sus inicios ha contado con una fuerte oposición del grupo verde y pacifista Koeberg Alert, que lucha contra la energía nuclear. En los últimos años lleva a cabo una intensa campaña de sensibilización contra la energía nuclear, la minería del uranio, el desarme nuclear y a favor de la energía renovable.
(African News Agency / otras fuentes, 26-07-12)
