Los jefes de la UE se reúnen hoy 3 de febrero 2017 en Malta, para reconsiderar la cuestión de los emigrantes con Libia, dado que es este país el principal punto de partida de los emigrantes africanos hacia la UE.
Aunque el número de migrantes que llegan a Libia, vía Níger, ha disminuido en los últimos seis meses, es una realidad que 2016 ha sido un año desastroso en el Mediterráneo. De las 181.000 personas que intentaron la travesía, al menos 4.500 perecieron en el Mediterráneo.
El acuerdo firmado el 18 de marso 2016, entre la UE y Turquía no ha frenado el número de emigrantes. Tan solo han cambiado la ruta. Del mar Ego a las costas de Libia.
La UE ha propuesto ya varias medidas para intentar frenar esta vía de los emigrantes: mayor apoyo a los guardas de la costa Libia, con ayuda financiera de hasta 200 millones de euros.
Italia propone un “Fondo África” de 200 millones de euros, para la gestión de la crisis de los refugiados, afectando a Libia, Níger y Túnez.
Estas propuestas no satisfacer a los organismos de Derechos Humanos, que ven estas concentraciones de migrantes, como “campos de concentración”. El derecho de asilo, ya no cuenta como uno de los derechos fundamentales de la humanidad.
En estos asentamientos de migrantes, se cometen torturas, ejecuciones, violaciones y se trata a los migrantes en meros esclavos. Los casos de ejecuciones de migrantes en Libia parecen ser innumerables. Así habla del embajador alemán en Níger.
¿Por qué no invierte la UE en promover nuevas oportunidades de desarrollo en los países africanos de origen?
Testimonios de Olivier Liffran en J.A. 2.2.2017
Traducido y editado por AFS
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