El gigante anglo holandés, Shell Petroleum Development Company, y ocho de las comunidades de acogida de sus operaciones, en el sur del país, las comunidades Ijaw, en el estado de Bayelsa, están enfrentadas por la negativa de la compañía a cumplir un acuerdo alcanzado entre las partes para el pago de una compensación a las comunidades que han sufrido en impacto del vertido de petróleo, del famoso pozo Seibou, en la zona.
Después del vertido, que devastó la comunidades Ogboinbiri, Azagbene, Kologbene, Apoi Olodiana, Kenebiama, Lobia, Okubie y Okparatubo), hace cuatro años, se llegó a un acuerdo entre ambas partes, pero Shell ha renegado, una situación que ha forzado a la gente a recurrir al litigio en un caso judicial, por el que las comunidades locales pidieron al tribunal que obligue a Shell a pagar la compensación de 7.200 millones de nairas, [moneda nigeriana: algo más de 38 millones de euros].
En la demanda, que se presentó en el Tribunal Federal Supremo de Yenagoa, las comunidades indígenas afectadas, afirman que el 25 de octubre de 2005, se produjo una fuga del oleoducto propiedad de Shell, y esta fuga, posteriormente se consideró esta fuga “un fallo del equipo de producción” y que se procedería a su inmediata limpieza, y se pagaría compensación por los daños causados.
Según ellos, en una reunión convocada por el gobernador del estado, Timipre Sylva, para abordar la continua confrontación entre las comunidades y Shell pro este asunto, no se alcanzó ninguna solución.
Tras el desacuerdo, el pueblo ha acudido una vez más a los tribunales para obligar a Shell a pagar la compensación demandada. El juez del tribunal de Yenagoa, ha aplazado la vista hasta la nueva audiencia, el 13 de octubre de 2010.
(This Day, Nigeria, 21-06-10)