El secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki Moon, se ha reunido, el día 16 de junio, con representantes de Nigeria y Camerún, en lo que ha sido la primera reunión de alto nivel entre las tres partes, desde las transferencia con éxito, el pasado mes de agosto, de la península de Bakassi, muy rica en petróleo, de Nigeria a Camerún.
La península, situada en el golfo de Guinea, ha sido objeto de intensas y algunas veces violentas disputas entre los dos países vecinos, durante décadas, hasta que se pusieron de acuerdo, bajo un proceso impulsado por la ONU, de solucionar el problema.
El Tribunal Internacional de justicia, resolvió el asunto con una sentencia emitida en 2002. Esta fue seguida por el “Acuerdo del árbol verde”, en 2006, firmado bajo los auspicios del anterior secretario general de la ONU, Kofi Annan, por el cual Nigeria reconocía la soberanía camerunesa de la península de Bakassi.
Un comunicado emitido después de la reunión declaraba que “además de suponer un hito importante en la implementación de una sentencia del Tribunal Internacional de Justicia, Camerún y Nigeria han proporcionado al mundo una poderosa ilustración de respeto al estado de derecho como una herramienta efectiva para resolución pacífica de disputas y un ejemplo excelente de buena vecindad”.
El comunicado añade que los representantes de los dos países se mostraron de acuerdo en agilizar las tareas que quedan por hacer para llevar a cabo otros aspectos de la sentencia, particularmente la delimitación y demarcación de su frontera común por tierra.
Los funcionarios de Nigeria y de Camerún que asistieron a la reunión son miembros de sus respectivas delegaciones en el Comité de Seguimiento, establecido por el acuerdo de 2006, para supervisar la implementación del acuerdo.
(African Press Agency, 17-06-09)