Los padres de niñas en Kenia están ahora en el punto de mira de la justicia. Esta última lucha sin descanso contra la práctica de la circuncisión femenina. Para ello, la sección del Ministerio de Justicia encargada de los casos de mutilación genital femenina ha escrito una carta a los padres de las estudiantes para prevenirles en contra de esta práctica ilegal. El envío de la carta a los padres se produce dos semanas después de que el Secretario General de la ONU pusiera en marcha, en Nairobi, una campaña mundial, para poner fin a esta práctica.
Las sanciones cada vez más fuertes
La justicia de Kenia desea, desde hace tiempo ya, poner fin a esta práctica. Después de la primera ley aprobada en 2001 que prohibía la circuncisión de niñas menores de 18 años y que conllevaba una pena de prisión de 12 meses, la Justicia tomó medidas drásticas en 2011 con sanciones más duras contra la circuncisión: si la operación ocasiona la muerte, la persona que lo practica es sentenciada, así como sus cómplices, a tres años de prisión. Además, los padres que permitan que sus hijas sean circuncidadas también serán condenados a tres años de prisión.
Este año, el fiscal ha ido aún más lejos al poner en marcha, en marzo, una unidad dedicada específicamente a la lucha contra la mutilación genital. Como resultado del trabajo de esta nueva unidad alrededor de cincuenta casos se encuentran, en estos momentos, pendientes de juicio.
[Fuente: afrik.com-Fundación Sur]