Miles de somalíes que huyen de los combates en los alrededores de la capital, Mogadiscio, se amontonan en la ciudad del norte de Bossasso, para intentar desde allí cruzar el golfo de Adén y entrar clandestinamente a Yemen, según ha desvelado la Agencia de Refugiados de las Naciones Unidas.
Hasta 12.000 civiles se han refugiado en Bossasso, la base desde donde los traficantes les suben a sus barcos para llevarles clandestinamente a Yemen, según la Agencia de la ONU.
Se calcula que 30.000 somalíes han cruzado en los que va de año el golfo de Adén, pero más de 300 han muerto en el intento o están desaparecidos.
La agencia asegura que un cuarto de millón de somalíes ha huido de sus casas desde el 7 de mayo pasado, cuando los rebeldes islamistas lanzaron un ataque concertado sobre Mogadiscio.
“Esta gente está obviamente llegando al final de la soga”, asegura el portavoz de la agencia de refugiados de la ONU, “no ven futuro en Somalia, y muchos de ellos están tan desesperados que están dispuestos a arriesgar sus vidas y las vidas de sus familias para escapar”.
(Shabelle, Somalia, 29-07-09)