El Movimiento por la Justicia y la Igualdad (JEM en sus siglas en inglés) y el Movimiento por la Liberación de Sudán- Minni Minnawi (SLM-MM en sus siglas en inglés), propusieron que la agenda del proceso negociado de la Unión Africana en Darfur incluyera asuntos que reiteran su rechazo a las soluciones parciales.
“Esta agenda para la declaración de Principios tienen que abordarse en Darfur, los asuntos regionales y nacionales del conflicto ya definidos por la AUHIP (African Union High-Level Implementation Panel) y el presidente Mbeki, como el conflicto de Sudán en Darfur. Esta agenda, por tanto, aborda los asuntos sudaneses en Darfur y prepara el camino para una solución pacífica al problema nacional”, dijo el grupo rebelde en un texto de dos páginas que llegó a Sudan Tribune.
Desde el 23 de noviembre las delegaciones del gobierno y los grupos rebeldes del JEM y SLM-MM empezaron las conversaciones de cese de las hostilidades y acuerdos de seguridad en Darfur.
Las negociaciones deberían sentar las bases para un proceso nacional para la paz y de reformas constitucionales en Sudán.
El martes el jefe de gobierno que negocia con la delegación, Amin Hassan Omer, renovó una vez más su rechazo sobre las discusiones sobre los asuntos nacionales o regionales diciendo que están en Addis Abeba para discutir una tregua sobre las bases del Documento de Doha para la Paz en Darfur (DDPD en su siglas en inglés).
Omer reiteró que el borrador de acuerdo de Doha es el documento de las partes interesadas de Darfur pero no el del gobierno o de los rebeldes.
Los mediadores del AUHIP, el martes, sostuvieron una reunión con los dos grupos rebeldes para discutir sus propuestas para la Declaración de Principios.
Las delegaciones rebeldes dijeron en su documento que la discusión debe incluir “el cese simultáneo de las hostilidades con fines humanitarios, protección de los civiles, crear y posibilitar un entorno y mejorar los mecanismos de supervisión internacionales”.
Los dos grupos dijeron que además de los acuerdos de seguridad las conversaciones deberían también tratar el estatus político de Darfur, el reparto de poder, el reparto de la riqueza, la reconstrucción y el desarrollo durante el período de transición, los refugiados y los desplazados internos, tierra, fronteras y asuntos nómadas, justicia y reconciliación y compensaciones.
Según la posición conjunta, las discusiones también deberían incorporar garantías vinculantes para el cumplimiento del acuerdo, con el compromiso de sostener el diálogo nacional con una aproximación al articulado de las decisiones de la Unión Africana y los principios básicos que guían el proceso de diálogo.
Se espera que la mediación prepare un borrador de declaración de principios y los proponga a las dos partes para más discusiones.
La pasada semana el jefe negociador del JEM, Ahmed Tugud Lissan declaró a Sudan Truibune que quieren un acuerdo en consonancia con la noción de dos vías en un proceso de paz, como proveía el plan de paz adoptado por el Consejo para la Paz y la Seguridad de la Unión Africana (AUPSC) el último mes de septiembre.
“Queremos crear una nueva vía (en Addis Abeba) en paralelo a la vía existente para el Movimiento de Liberación del Pueblo de Sudán-Norte (SPLM-N). Esto significa eventualmente que el DDPD y su resultado ya no son más discutidos o siquiera considerados”, dijo Lissan.
Sudan Tribune
