Este artículo se ha extraído del periódico mensual Le Pouvoir aux Travailleurs, del 9 de septiembre, del Sindicato Africano de Trabajadores Comunistas Internacionalistas, UATCI.
El 27 de agosto, los trabajadores del sector público de Chad, convocados por la Unión de sindicatos de Chad, UST, continuaron su movilización de huelga lanzada el 17 de julio anterior, renovable por una semana, con servicios mínimos en los dominios esenciales como la sanidad, frente a la actitud del gobierno que se niega todavía a satisfacer sus reivindicaciones (…)
Los agentes del estado reclaman la aplicación del acuerdo firmado con el gobierno el 11 de noviembre de 2011, sobre una tabla salarial, para el aumento general de los salarios. (…)
El primer ministro, que se ha reunido con los huelguistas recientemente, ha declarado: “vuestras reivindicaciones son legítimas, pero sencillamente el estado no tiene los medios para satisfacerlas de inmediato”. En cuanto a su jefe, el presidente de Chad Idris Déby, amenaza con romper las negociaciones con los sindicatos para organizar un “referéndum” sobre el aumento de salario a los funcionarios. (…) El presidente se niega todavía a satisfacer las reivindicaciones de los trabajadores, a pesar de que él mismo es quien firmó el acuerdo del 11 de noviembre de 2011, bajo el pretexto de que “aumentar los salarios, sería dilapidar los recursos financieros”.
¿Quién dilapida los “recursos financieros” del estado si no es él, Deby, su familia y su clan? Corren rumores en Yamena [la capital de Chad] de que él se ha hecho multimillonario, y ello gracias sobre todo al petróleo de Doba, en el sur del país, del cual partes sustanciales van directamente a su bolsillo. Pero la mayor parte de los dividendos es acaparada por las petroleras internacionales que explotan este petróleo.
Los funcionarios del estado no hacen más que defender su “gombo” [una sopa] (cualquier forma de ganarse el pan), y es su derecho legítimo. Con la huelga, quieren hacer ceder a Déby, con su arrogancia y su desprecio por el mundo del trabajo, y su gobierno.
(Tchadonline, 27-09-12)
