El gobierno ruandés inquieto ante el regreso de Alain Juppé al Quai d’Orsay
«Es una mala sorpresa», exclamó la ministra de Asuntos exteriores de Ruanda, Louise Mushiwikwabo, al enterarse del retorno de Alain Juppé al ministerio de Asuntos Exteriores. Hasta tal punto que el embajador de Ruanda en París, Jacques Kabare, ha sido llamado a consultas. Efectivamente, Juppé ocupó esta función entre 1993 y 1995, estos es, durante el genocidio ruandés.
Según el informe de la comisión Mucyo, reproducido por la web www.lanuitrwandaise.net – denunciada ante la justicia francesa por nueve oficiales franceses – Juppé aportó todo su apoyo en 1994 a las fuerzas genocidas. “Para preservar la calidad de las relaciones que mantenemos con Francia desde noviembre de 2009, Juppé deberá hacer enormes esfuerzos, a la vista de los daños que ha causado al pueblo ruandés”, ha añadido Louise Mushiwikwabo. “Desafortunadamente desde 1994, su comportamiento no ha evolucionado. Por ejemplo, ha acogido mal el restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre Francia y Ruanda en 2009.
Otras organizaciones próximas al régimen ruandés lamentan igualmente el regreso a Asuntos Exteriores de Alain Juppé. Alain Gauthier, presidente del colectivo de las partes civiles para Ruanda (CPCPR), teme que la llegada de Juppé frene en acercamiento entre Ruanda y Francia y ponga en peligro la creación de una unidad especial de investigación sobre el genocidio, afectada al TGI de París. Un diputado ruandés, superviviente del genocidio, Evade Kalima, se ha declarado también preocupado por el nombramiento de Juppé. “Juppé es un hombre retorcido, arrogante, inflexible y revanchista”, ha declarado concretamente.
En lo que respecta a Laurent Contini, embajador de Francia en Ruanda, ha querido tranquilizar al gobierno ruandés, declarando que Juppé había evolucionado y que la política extranjera era establecida por el presidente.
Por Jean-Bernard Gervais 03/03/2011
Fuente: france-rwanda.info
Traducción y adaptación de Ramón Arozarena.