La decisión de la Autoridad de emisiones de Lesotho de ordenar el cierre de la única emisora de radio privada del país, ha sido duramente criticada por los defensores de la libertad de los medios, como un asalto a la libertad de expresión. “Harvest FM”, que siempre estaba en desacuerdo con el Gobierno del pequeño reino del sur de África, ha recibido la orden de dejar de emitir durante tres meses, acusada de no cooperar con la autoridad que concede las licencias.
“La libertad de expresión se está negando cuando una emisora de radio se cierra. Esto no es apropiado para un Gobierno que se define como democrático. ¿Dónde está aquí la democracia? Un Gobierno no debe ser inmune a las críticas.”, ha asegurado Peter Potjo, del Instituto de Medios para el Sur de África, de Lesotho.
El popular magazine matutino de la emisora, el “Rise and Shine”, donde se hicieron los comentarios contra el comisario de policía que interpuso una queja sobre el mismo, a menudo a levantado las iras en el Gobierno. En 2007, el presentador del show, Thabo Thakalekoala, fue acusado de “sedición” después de leer una carta en la que se pedía la dimisión de algunos funcionarios del Gobierno, por mala administración y corrupción.
La emisora, que volverá a emitir el 21 de octubre, se ha convertido en la primera víctima de la modificación de la ley, que permite al Ministro de Comunicaciones cerrar cualquier emisora que considere que está incumpliendo las leyes.
(IOL, 30-07-08)