La crisis política de Zimbabue se ha agravado el día 3, por las manifestaciones esporádicas contra la abrumadora escasez de dinero en metálico y una enfermedad que es como una bomba que hace tic tac en el país.
Policía antidisturbios, fuertemente armada, dispersó violentamente diversas protestas por separado, una del Congreso de los sindicatos de Zimbabue, ZCTU, y otra de las enfermeras y médicos, en Harare, que protestaban contra la escasez de dinero efectivo en el país y por el brote de cólera, que hasta el momento ha matado a más de 500 personas.
El ZCTU planeaba llevar a los trabajadores y a los consumidores a sus respectivos bancos para pedir que les den su dinero, mientras que el sindicato pretendía presentar una petición al Banco de Reserva de Zimbabue, al gobernador Gideo Gono, pidiendo que se levanten los límites de retirada de dinero efectivo. Todos ellos fueron interceptados por la policía que cargó contra los manifestantes, arrestando a algunos de ellos, lo que causó el caos en el centro de la ciudad.
La policía antidisturbios también dispersó otra manifestación de enfermeras y médicos a las afueras de las oficinas del gobierno, ante la oficina del ministerio de Sanidad en Harare.
Los manifestantes querían una audiencia con el ministro de Sanidad, David Parirenyatwa, para hablar de sus condiciones de trabajo y de la indiferencia del estado ante el brote de cólera, que se ha cobrado ya más de 500 vidas.
Uno de los manifestantes manifestaba que el personal médico temía incluso por su propia seguridad, ya que nadie se está ocupando del brote de cólera. Esta enfermedad es altamente contagiosa y se contrae por el uso de agua contaminada o por el contacto con una persona infectada.
(African Press Agency, 03-12-08)