El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, pidió el viernes a los protagonistas de la crisis política de Guinea Bissau «que actuaran de manera responsable y se abstuvieran de la violencia».
Declarándose «muy preocupado» por la crisis, Ban declaró en un comunicado que » la crisis está afectando gravemente al funcionamiento de las instituciones del país y podría dañar su desarrollo socio-económico».
Instó a «todos los políticos a poner fin con urgencia a este callejón sin salida en el interés de la población y sobre la base de la constitución del país».
Ban «elogia el profesionalismo de las fuerzas armadas nacionales en el cumplimiento de su deber y les pide que sigan actuando con responsabilidad».
Dos semanas después de la disolución del gobierno, el presidente José Mario Vaz nombró primer ministro a Baciro Dja. Pero esta decisión fue cuestionada de inmediato en la calle por los partidarios del partido gobernante.
Esta antigua colonia portuguesa atraviesa una gran turbulencia política desde que en agosto de 2015 el presidente Vaz, destituyó a su primer ministro Domingos Simões Pereira, una decisión rechazada por el Partido Africano para la Independencia de Guinea Bissau y Cabo Verde (PAIGC en el poder).
Estas tensiones preocupan a la comunidad internacional ya que Guinea Bissau ha experimentado, desde su independencia en 1974, repetidos intentos de golpes militares.
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