Rosine se ha tranquilizado, embarazada de su cuarto hijo con cuarenta años, acaba de saber que no tiene el SIDA. Acaba de llegar del centro de atención prenatal en Bohicon, al sur de Benín, donde le hicieron las pruebas de forma gratuita. «Tenía miedo de que la prueba fuera positiva. Mi marido es un conductor, y ya se sabe», declaró a la AFP esta mujer de rasgos fuertes, que lleva una vestimenta tradicional.
Desde hace 15 años, Benín se ha centrado en la lucha contra la transmisión del VIH de madre a hijo y el acceso a los antirretrovirales en los casos de seropositividad.
El programa abarca el 87% de las maternidades públicas y privadas. Y es un éxito: la transmisión de la enfermedad de madre a hijo se ha reducido a la mitad entre 2012 y 2016, del 14 al 7,6%.
«El programa está totalmente integrado con la salud materna, es una rutina», cuenta Blandine Mekpo, comadrona desde hace 11 años. «Todas las mujeres que acuden a la atención prenatal aceptan someterse a la prueba».
Elise sostiene a su hija, llamada Elise, en brazos. Hace quince meses, la joven madre supo que era VIH positiva. La maternidad, de inmediato, le entregó una caja de 30 antirretrovirales (ARV). El tratamiento es gratuito, y ha sido eficaz. Su bebé de 6 meses de edad, a la que está amamantando, no está contaminado.
«Es una gran alegría. El programa me salvó, salvó a mi hijo y a mi marido. Él es el único que lo sabe. Vivo normalmente, como todas las mujeres, como todas las madres», dice con una sonrisa tímida. El análisis serológico de la hija de Elise, se seguirá de cerca hasta los 18 meses.
«Cuando la madre toma ARV, no transmite el virus a su feto, ya sea durante el embarazo o el parto o la lactancia», recuerda Blandine Mekpo. El riesgo de transmisión es de hecho de menos de un 1%, frente al 35% en ausencia de un tratamiento preventivo.
Aunque la prevalencia del VIH es baja en el resto del país (1,2%), en la maternidad de Bohicon, se registran 100 nacimientos por mes, con un promedio de 2 casos de seropositivos. Este año, sólo un niño estaba infectado.
La participación de los maridos
Estos buenos resultados se deben a varios factores. En primer lugar su gratuidad. A continuación, la disponibilidad de reactivos, suministrados por UNICEF y los ARV ofrecido por el Fondo Mundial de Lucha contra el SIDA. «Antes existía el riesgo de ruptura de stocks, porque todo se almacena en Cotonú», la capital económica en el sur, cuenta el Dr. Nicole Paqui, responsable del programa de sida de Unicef. «Hoy en día, las pruebas y los medicamentos están disponibles de forma permanente en todas las zonas sanitarias». La formación de enfermeras y auxiliares de enfermería también ha permitido una mejor aceptación en las maternidades. El SIDA es menos tabú y el personal no tiene miedo cuando se detecta un nuevo caso.
Pero en Bohicon, como en otros lugares, sigue habiendo problemas. A veces los hospitales pierden la pista a los pacientes infectados. Unos abandonan debido a los efectos secundarios, mientras que otros no asumen su enfermedad por temor a la estigmatización. A veces la razón es de carácter financiero, cuando los maridos no les dan dinero para el transporte al centro de salud.
Para luchar contra este fenómeno, las mediadoras acompañan a las mujeres. «Cuando ven que algunas no vienen, se van a sus hogares a buscarlas», nos cuenta el Dr. Blaise Guezo-Mevo, coordinador del área de salud.
Según él, de esta forma se ha recuperado al 70% de las mujeres. «Y cuando la recuperamos, no las perdemos nunca más».
A mediados de noviembre, el Ministerio de Salud puso en marcha una ambiciosa campaña para llegar de aquí a 4 años a una transmisión de madre a hijo de menos del 5%.
Para lograr esto, también habrá que contar los hombres. «La participación de los cónyuges es esencial», asegura el doctor Paqui. «Cuando el hombre está informado y apoya a su esposa, todo va perfecto. Pero si ella tiene que ocultárselo, el protocolo no es eficaz».
Elise ha tenido esa oportunidad. Su marido se hizo la prueba y dio, negativo, y es él el que incluso viene a recoger los medicamentos a la maternidad.
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Fundación Sur
