No se disolverá la guardia presidencial de Burkina Faso, que había sido acusada de varios delitos durante la presidencia del exjefe de Estado Blaise Compaoré. Quien lo anunció fue el primer ministro burkinés, el coronel Isaac Zida. “El ejército y el país necesitan al Regimiento de Seguridad Presidencial (RSP)” declaró
Hervé Kam, portavoz del movimiento Balai Citoyen, que estuvo en primera fila en las protestas contra Compaoré de octubre del año pasado, dijo que la unidad “es conocida por muchos delitos de sangre, y una de las causas de la revuelta fue la existencia de esta milicia”, agregó.
Además de la represión de las protestas que causaron 31 muertos y unos 600 heridos, según cifras actualizadas, algunos miembros de la guardia presidencial fueron acusados ??y condenados, entre otras cosas, por la muerte de David Ouédraogo, conductor de François Compaoré, hermano del ahora ex presidente. El caso Ouedraogo estaba siendo investigado por Norbert Zongo, un periodista local que también fue asesinado.
En febrero, el propio Zida había anunciado la disolución del RSP, en el que él mismo se había formado. En respuesta, los soldados habían pedido su renuncia. Después, la crisis regresó tras una mediación en la que había participado el propio presidente interino de la República, Michel Kafando.
MISNA (Fundación Sur)