La empresa suiza de comercio de petróleo Glencore, que había sido enjuiciada en Estados Unidos, confesó que habían practicado sobornos a distintos cargos oficiales y personal de las administraciones de ocho países de todo el mundo. La suma total de todos los sobornos ascendía a un total de cien millones de dólares estadounidenses y tenían la finalidad de obtener y retener los contratos de explotación y comercio en los estados africanos de Nigeria, Camerún, Costa de Marfil y Guinea Ecuatorial.

Si bien el descubrimiento de este escándalo de corrupción ha levantado la indignación de los partidos de la oposición, en Costa de Marfil la noticia parece haber pasado algo inadvertida. Aun así, se ha destapado que algunos cargos costamarfileños cobraron sobornos, cuyo total ascendía a 4 millones de dólares estadounidenses, durante el mandato de Laurent Gbagbo, entre 2007 y 2010. No obstante, se desconoce la identidad de los miembros de la administración que cobraron dichas cantidades.

En el caso de Nigeria, es conocido que el comercial de la empresa Glencore, Anthony Stimler, gestionó una red de sobornos a cargos oficiales de la administración nigeriana que le granjearon algunos contratos beneficiosos con la empresa nacional de petróleo de Nigeria, NNPC.

Desde algunos organismos internacionales y continentales se ha sugerido que la justicia de los países correspondientes investigue los cobros sistemáticos de estos sobornos.

Fuente: AllAfrica – Michael Tantoh

[Traducción y edición, Mario Civantos González]

[CIDAF-UCM]

Artículos relacionados:

 Boko Haram deja tres nuevas víctimas en Nigeria