Treinta millones de africanos por todo el mundo han invertido directamente 40.000 millones de dólares en la economía del continente en 2010. Según una encuesta llevada a cabo recientemente por el Banco Africano de Desarrollo y el Banco Mundial, la inversión de los africanos va desde en adquisiciones de terreno a construcciones de casas, y la apertura de un negocio es la inversión que más africanos en la diáspora ha hecho, a través de sus remesas. Mientras que la educación es la segunda inversión más realizada, con las remesas de fuera de África, concretamente hacia Nigeria y Uganda, el tercer país que más remesas recibe es Burkina Faso, y el cuarto es Kenia.
El informe titulado “Remesas recibidas por los países africanos, habilidades e inversiones” ha sido realizado conjuntamente por el Banco Africano de Desarrollo y el Banco Mundial, como parte del Proyecto Africa Migration.
Este proyecto tiene el apoyo financiero del Banco Africano de Desarrollo y diversas agencias y organismos de desarrollo internacionales y de países donantes.
El desglose de la inversión de 40.000 millones de dólares muestra que los nigerianos en la diáspora invirtieron el 57 %, los de keniatas el 55 %; los burkineses el 36 %, los ugandeses el 20 % y los senegaleses el 15 %.
Hans Timmer, director de proyectos de desarrollo del Banco Mundial, afirma que es probable que la cifra aumente, debido al aumento de la población del continente. Timmer declara que “las presiones de las migraciones solo aumentarán en el futuro como resultado de los cambios demográficos del aumento de la población en África, y el descenso de la mano de obra en Europa y muchos países desarrollados”, afirmó, “por tanto, es esencial dar respuestas con políticas de adaptación a las fuerzas demográficas y elaborar acuerdos de gestión futura de las migraciones”.
Además señaló que dos tercios de los migrantes del África subsahariana, particularmente los más pobres, van a otro país de su misma región, mientras que más del 90 % de los migrantes del norte de África han viajado fuera del continente africano.
Los destinos más elegidos por los migrantes africanos son Francia, con un 9 % del total de los migrantes, Costa de Marfil, con el 8 %, Suráfrica, con el 6 %, Arabia Saudí, con el 5 %, y Estados Unidos y Reino Unido, con el 4 % cada uno.
Shantayanan Devarajan, jefe economista para la región África, del Banco Mundial, señaló que “las migraciones de mano de obra cualificada es particularmente alta en países africanos de ingresos bajos y medios, que ya tienen bajos niveles de capital humano. Los países frágiles o en situación de post guerra se enfrentan a problemas mayores aún, por la huida del capital humano.
“Los gobiernos y políticos africanos deberían centrarse en aumentar la educación a todos los niveles de formación y establecer un ambiente en el que los trabajadores altamente cualificados tengas oportunidades de empleo productivas en su propio país.”
Por su parte, Dilip Ratha, principal autor del informe y economista principal del Banco Mundial, en su propia presentación dijo que los gobiernos africanos deben reforzar los lazos entre sus diásporas y los países, para proteger a los migrantes, y ampliar la competencia en el mercado de remesas, ya que el potencial de la migración para África permanece en gran parte sin explotar.
Según Ratha, “una innovación que merece ser considerada son los bonos de la diáspora, que son vendidos por los gobiernos o las compañías privadas a los ciudadanos que viven en el extranjero”. Estos bonos ya han tenido éxito en explotar los activos de los ciudadanos israelíes e indios, que viven fuera de sus países.
“Los países del África subsahariana pueden recaudar potencialmente entre 5.000 y 10.000 millones de dólares al año con los bonos de la diáspora. Países con grades diásporas que viven en países de altos ingresos, que potencialmente pueden emitir bonos de la diáspora son Etiopía, Ghana, Kenia, Liberia, Nigeria, Senegal, Uganda y Zambia, en el África subsahariana, y en el norte, Egipto, Marruecos y Túnez.
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(Vanguard, Nigeria, 07-04-11)
