El ataque a la residencia de Joseph Kabila, presidente de la RDC, el 27 de febrero, reaviva el espectro de los golpes de Estado en la región de los Grandes Lagos. Un ataque que no tranquiliza al vecino y aliado ruandés Paul Kagame, que ha anulado todos sus desplazamientos al extranjero (y concretamente a París) por miedo a un golpe.
En Kigali, el ataque de un centenar de hombres armados a la residencia de Kabila ha sido seguido de cerca por el entorno de Kagame. El ministro de defensa ruandés, James Kabarebe, incluso se ha desplazado a Kinshasa para reconocer los cuerpos de los ruandeses que protegían a Joseph Kabila. El presidente congoleño no se encontraba en su residencia en el momento del asalto. Balance trágico: 19 muertos y 126 prisioneros.
Sin embargo, la tentativa de golpe de Estado estaba preparada minuciosamente. Los insurrectos tenían varios objetivos: la residencia del Jefe del Estado, la base logística central del campo militar Kokolo, el aeropuerto internacional de N’djili y el aeródromo de Ndolo, la radio Televisión Nacional (RTNC) y las dos cárceles de Kinshasa, Ndolo y Makala.
Según la policía, los insurrectos venían “del extranjero”, de Brazzaville, al otro lado del río. Afrique Intelligence cree saber que esos elementos habían sido enviados por dos rebeldes congoleños refugiados en Brazzaville: Faustin Munene (ARP) y Udjani Mangbama, jefe de la milicia de los enyele del Ecuador.
Al día siguiente del ataque, el aliado ruandés de Kabuila, Kagame, envió a su ministro de Defensa y fino conocedor del dossier congoleño, James Kaberebe. En efecto, la seguridad del presidente Kabila está cubierta por soldados del ejército ruandés. Desde 2009, la RDC y Ruanda han puesto en marcha una operación militar conjunta para eliminar la rebelión de los refugiados hutu ruandeses de las FDLR en el este de la RDC. El ejército ruandés y las autoridades de Kinshasa cooperan en consecuencia en numerosos terrenos, entre ellos la seguridad del jefe de Estado congoleño. Kigali está muy preocupado por la situación de seguridad en la RDC.
Pero, las autoridades ruandesas están inquietas también por otras razones. En Ruanda, la atmósfera está cada vez más tensa desde hace unos meses. En un año una decena de atentados con granadas han sacudido regularmente la capital, Kigali. El poder acusa a la oposición de querer desestabilizar el país. Un antiguo teniente de las FDLR que operan en el este de la RDC ha confesado últimamente. Pero Kagame piensa que el enemigo está en el interior…, entre antiguos compañeros del APR (ejército patriótico ruandés), brazo armado del FPR, partido del presidente. Según un artículo muy documentado aparecido en la página de Internet Ovni, este enemigo interior se llama Kayumba Nyamwasa. Este general ruandés opuesto frontalmente a Kagame está refugiado en Suráfrica. El 19 de junio fue víctima de un atentado en Johannesburgo. Un periodista ruandés afirmó que Kagame estaba detrás de este atentado, y días después fue abatido en Kigali. Siempre según el artículo de Ovni, el nuevo partido de Kayumba Nyamwasa, Ruanda Nacional Congreso (RNC), ha establecido contactos con las FDLR, que operan en el este de la RDC. La seguridad del régimen de Kagame pasa en consecuencia por la estabilidad del vecino Congo. El ataque a la residencia de Kabila es por lo tanto una muy mala noticia para Kagame que debe redoblar su vigilancia y velar por la seguridad de su aliado congoleño.
Christophe Rigaud
(Afrikarabia 10/03/2011)
Traducido por Ramón Arozarena.