El día 6 de abril, Joyce Banda, declaró ante sus seguidores que no hay lugar en Malaui para la venganza, durante la ceremonia de su investidura como nueva presidenta de Malaui, la segunda mujer jefe de estado de África, en los tiempos modernos, después de la muerte del divisor presidente Bingu wa Mutharika.
Joyce Banda ofreció palabras conciliadoras tras los dos días de intriga política, en los que el círculo cercano de Mutharika intentó bloquear su ascenso a la presidencia, lo cual le correspondía como vice presidenta, según la constitución.
Al terminar Banda su discurso de la toma de posesión como presidenta, estallaron aplausos y vítores de alegría, tras lo cual, la presidenta pidió un momento de silencio por el hombre al que alabó como padre de la nación.
Pero Banda no ocultó las divisiones provocadas por Mutharika, que la había expulsado del partido gobernante. “Quiero que todos avancemos hacia el futuro con esperanza y con ese espíritu de unión y unidad”, dijo.
“Espero sinceramente que no haya sitio para la venganza. Espero sinceramente que permanezcamos unidos”, añadió.
Mutharika murió de un ataque al corazón el día 5 de abril, justo en medio de peticiones públicas de su dimisión, después de las mortales manifestaciones de protesta antigubernamentales del año pasado, acusando al presidente de haber arruinado la economía y pisoteado la democracia.
Después de su expulsión del Partido Democrático Progresivo, de Mutharika, Banda formó su propio Partido del Pueblo, hecho que para los aliados del difunto presidente debería haberla descalificado para sucederle.
Pero entre presiones de los poderes africanos y occidentales para que se llevase a cabo una transición pacífica y constitucional, Banda apareció el día 7 de abril flanqueada por los jefes del ejército y la policía, para convocar una reunión especial del gabinete de ministros y hacer valer su autoridad.
“Quiero agradecer sinceramente a los malauianos y a toda la gente que vive en Malaui el respeto de la ley mostrado con esta transición de presidencia pacífica”, declaró Banda.
Mientras tanto los soldados vigilaban los alrededores del parlamento y se hicieron cargo de la seguridad en la radio y televisión estatales, ya que el ejército respaldó públicamente la transición entre líderes civiles.
Malaui ha declarado 10 día de luto, y todavía tiene que anunciar los planes para los funerales de Mutharika.
Banda es la segunda mujer jefa de estado africana, en los últimos tiempos, después de la liberiana, Ellen Johnson Sirleaf.
Banda se enfrenta al reto de liderar un país cuyo parlamento está dominado por el partido de Mutharika, y a la cabeza de un gabinete que incluye ministros abiertamente opuestos a ella. “Había bastante tensión y estamos contentos de que al final todo haya resultado ser pacífico”, declaró el legislador Kezzie Msukwa. “El partido se lo ha tomado dolorosamente, sin embargo, creo que ahora todo el mundo está de acuerdo en que tenemos que ir en la dirección en la que estamos yendo”, añadió.
Mutharika, un ex economista del Banco Mundial que llegó al poder por primera vez en 2004, fue reelegido con una arrolladora mayoría en 2009.
Pero últimamente había sido muy criticado por intentar dominar los medios de comunicación y blindar el gobierno a las críticas públicas.
Sus enfrentamientos con los donantes y prestamistas como el Fondo Monetario Internacional habían paralizado la economía de esta nación dependiente de la Ayuda.
Ahora Malaui sufre de escasez de divisas que han llevado a que no pueda importar suficiente combustible.
Cuando surgió la frustración pública por las calles de toda la nación, en julio, la policía disparó y mató a 19 personas. El mes pasado, una amplia coalición de grupos de defensa de los derechos humanos pedían la dimisión de Mutharika.
La comunidad internacional sin embargo ha sido generosa en sus tributos a Mutharika.
La Unión Africana dijo el día 7 de abril que había perdido a “uno de sus hijos más grandes”.
Se le atribuye con razón el impulso de la economía de Malaui, especialmente en el sector de la agricultura”, afirmaba el jefe de la comisión africana, Jean Ping, en un mensaje de condolencias enviado a la nueva presidenta, Joyce Banda.
Un comunicado recibido de la Unión Europea le recordaba con un defensor de la seguridad alimentaria en África y por su éxito en alcanzar la seguridad alimentaria en Malaui”.
La Commonwealth expresó sus condolencias, pidiendo que se tomase el camino hacia delante de forma pacífica y constitucional, el sábado, día 7 de abril.
Estados Unidos “extienden sus condolencias al pueblo de Malaui y a la familia del presidente Bingu wa Mutharika, tras su reciente fallecimiento, y “damos la bienvenida al anuncio de hoy, que Joyce Banda ha jurado su cargo como presidenta”, declara en un comunicado el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, Tommy Vietor. “Al seguir los procesos constitucionales para su transición, el gobierno y pueblo de Malaui han reafirmado su compromiso con los principios democráticos y ha demostrado la importancia crucial de tener unas sólidas instituciones democráticas”, añadió.
El secretario general de la ONU, Ban Ki Moon emitió un comunicado diciendo que “recibe con alegría la transición pacífica en Malaui, Y que espera trabajar con el gobierno de la presidenta Joyce Banda”.
Justine Gerardy
(The Namibian, 10-04-12)