Las historias son importantes. Sirven para transmitir y preservar los recuerdos, la historia y los valores culturales a través de las generaciones. Con el tiempo, la práctica secular de la narración ha evolucionado y tomado diferentes formas, gracias a la llegada de la tecnología, Internet y los nuevos medios de comunicación.
Ya se trate de un programa de televisión o de radio, vídeos, parodias o cómics, ahora existen nuevos medios a través de los cual se pueden contar historias a un público amplio y diverso. Modé Aderinokun es una contadora de historias, una joven nigeriana en la diáspora que está compartiendo su historia con el mundo a través de una serie de cómics en la web, llamada JAND.
Jand, argot en el pidgin inglés nigeriano para el Reino Unido, que, en este caso, fue acuñado por ser el acrónimo de “Just Another Nigerian Drama”, narra la vida de los estudiantes nigerianos que viven y estudian en Londres. En un artículo de OkayAfrica, Aderinokun declaró que la inspiración le vino por la necesidad de mostrar un lado diferente de Nigeria, y una clase diferente de nigerianos. Una clase de nigerianos que no aparecen a menudo en los medios de comunicación, los nigerianos de clase alta y media.
Hay una creciente cultura del cómic en Nigeria que ha dado a luz una industria con un gran potencial que aún no se ha aprovechado plenamente. Unos nigerianos como Jide Martins de Comic Republic y Somto Ajuluchukwu de Vortex Comics están trabajando duro para educar a la audiencia a valorar las historias de África y su cultura a través de los cómics, pero muchos de sus personajes son superhéroes y criaturas míticas, no personas comunes de todos los días personas con experiencias vitales narrables. Este es el hueco que Jand llena.
Los personajes y la narrativa de Jand, de Aderinokun, se modelan después de las experiencias cotidianas de los jóvenes nigerianos en la diáspora. Como ha estudiado en Nigeria y en Londres, es fácil para ella para crear historias extraídas de experiencias personales. «Todos los personajes encarnan algo de mí», admitió, añadiendo que algunos caracteres se basan libremente en personas y situaciones. «Sin embargo, los personajes tienden a tener una vida propia».
Con personajes y narrativas construidas en torno a temas familiares como el amor, el sexo, la religión y la cultura, el cómic es muy interesante, con un atractivo multicultural. Esta es una característica que según Aderinokun es muy importante y es la que ha dado al comic fieles lectores de las historietas.
Al tratar de hacer que Jand fuera más entendible y accesible, tanto al público de Nigeria como al extranjero, el cómic introduce un poco de inglés pidgin y un glosario para las personas que no están familiarizadas con el lenguaje coloquial de Nigeria. Aderinokun dice que, al hacerlo, quiere mostrar a los no nigerianos como nuestras historias y culturas son universalmente relacionables. A pesar de que somos de diferentes culturas, en el fondo, nuestras historias son las mismas».
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