Inversiones extranjeras, convergencia y competencia en la integración africana, por José María Mella Márquez

2/02/2022 | Blog Académico


El presente artículo comprende el tercer capítulo de la serie de estudios y visiones sobre la integración económica bajo el Tratado de Libre Comercio Africano (AfCFTA, por sus siglas en inglés) escritos por nuestro insigne colaborador José María Mella, Catedrático Emérito de la Universidad Autónoma de Madrid y miembro de Africa, Mediterranean, and Europe Jean Monnet Network, UE (AMENET).

Hay retos a los que las economías africanas no deben renunciar. Forman parte del proceso de integración y del desarrollo económico. Nos referimos a la atracción de la inversión extranjera directa (IED), a la convergencia macroeconómica entre países y a la competencia internacional.

Un estudio reciente sobre los factores que estimulan la IED indica que la apertura comercial, la dotación de infraestructuras, la eficiencia de la logística y un buen entorno empresarial influyen en la atracción de inversiones dentro de África. Sin embargo, la inversión extranjera directa (IED) en África disminuyó un 16% en 2020, a 40.000 millones de dólares, ya que la pandemia de COVID-19 siguió teniendo un impacto negativo persistente en la inversión transfronteriza a nivel mundial y regional.

En efecto, el continente entró en su primera recesión en 25 años, la desaceleración económica fue brutal y las restricciones a la movilidad pesaron mucho en los indicadores de inversión. En medio del lento despliegue de vacunas y la aparición de nuevas cepas de COVID, persisten importantes riesgos a la baja para la inversión extranjera en África, y las perspectivas de una recuperación sustancial inmediata son sombrías. De ahí que la IED en África se espera que haya aumentado 2021, pero sólo marginalmente.

Un aumento esperado de la demanda de productos básicos, nuevas oportunidades debido a la reestructuración de la cadena de valor mundial, la aprobación de proyectos clave y la inminente finalización del Protocolo de Inversión Sostenible del acuerdo de la Zona Continental Africana de Libre Comercio (ZCALC) podrían llevar a que la inversión cobrara un mayor impulso en 2022.

En realidad, la IED en África se enfrenta a fuertes vientos en contra a corto plazo con importantes riesgos a la baja. No obstante, a más largo plazo, la disponibilidad de vacunas, las políticas nacionales de recuperación económica y el apoyo financiero internacional serán fundamentales para la reactivación de la IED y la recuperación post-pandémica.

afcta-logo-2.jpgSe pronostica que la aplicación de la ZCALC estimule de forma significativa a la inversión extranjera en las zonas económicas especiales (ZEE) africanas. Una encuesta reciente reveló que la gran mayoría de las zonas económicas especiales africanas ven a la ZCALC con optimismo: más del 85% de los encuestados esperan que la IED de África aumente significativamente, mientras que casi la totalidad de los encuestados (95%) espera que la inversión de fuera de África lo haga. En el contexto de una mayor integración regional, es probable que los inversores internacionales busquen cada vez más inversiones regionales en la búsqueda de mercados, considerando las zonas económicas especiales africanas como puntos de entrada en todo el mercado continental, por lo que aumentarán la IED hacia las zonas más competitivas.

Por otra parte, cinco de las ocho Comunidades Económicas Regionales (CER) siguen persiguiendo activamente la convergencia macroeconómica y la integración monetaria. La convergencia macroeconómica se define como la reducción de las disparidades en indicadores económicos, como la inflación, los niveles de crecimiento y el ingreso per cápita. La razón para buscar la convergencia macroeconómica es incitar a los miembros de las agrupaciones regionales a reaccionar de manera similar a variables económicas tales como la estabilidad de precios, los déficits presupuestarios y la relación deuda-PIB, lo que beneficia a toda la región para sentar las bases de las uniones monetarias.

En la actualidad, funcionan tres uniones monetarias en África, que representan un paso para la unión monetaria del continente. El logro de una moneda única africana (“Afro”) representaría un paso político de primer orden, con el “Afro” representando un símbolo de la unidad de África y de su mayor nivel de integración. No obstante, una valoración de los costes implicaría la pérdida de la política monetaria de cada uno de los estados para responder a los choques asimétricos, que no deben subestimarse. Como contrapartida, la unión monetaria permite una menor inflación y mayor estabilidad, si bien la ausencia de un tipo de cambio nominal implicaría que las economías africanas serían vulnerables a los desajustes en los precios relativos.

Una unidad monetaria implica la necesidad de contar con la coordinación de las políticas fiscales de los estados miembros para disponer de un mecanismo de transferencias cuando experimenten shocks negativos y necesiten mantener los niveles de empleo e inversión. Aunque la experiencia europea del euro muestre que este instrumento de estabilización se ha visto enfrentado a series dificultades por la falta de solidaridad para mutualizar los recursos fiscales.

Finalmente, la política de competencia es un motor clave del crecimiento de los mercados competitivos en África. Pero las prácticas anticompetitivas transfronterizas prevalecen en todo el continente, como los cárteles y el abuso de posición dominante, y limitan el crecimiento de los mercados competitivos y perjudican a los consumidores.

La proliferación de regímenes de competencia en África exige una armonización. Para consolidar los esfuerzos de las comunidades económicas regionales, un régimen de competencia en todo el continente sería un próximo paso oportuno y necesario y los países que no pertenecen a estas comunidades podrían incluirse en el marco de la ZCALC.

En suma, el estímulo de las inversiones exteriores, la estabilidad macroeconómica y una mayor competencia son tres vértices claves del crecimiento y el desarrollo sostenible de África.

José María Mella Márquez

[CIDAF-UCM]


Serie de estudios y visiones sobre la integración económica bajo el Tratado de Libre Comercio Africano (AfCFTA):

Tamaño, proximidad e integración económica en África

Pequeña dimensión, infraestructuras y fronteras en la integración africana

Autor

  • José María Mella Márquez

    Catedrático emérito de Estructura Económica y Economía del Desarrollo de la Universidad Autónoma de Madrid. Es autor de un gran número de libros e investigaciones especializadas en su área profesional y miembro de la red euroafricana de universidades AFRIQUEUROPE, así como colaborador del CIDAF-UCM. @josemariamella

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