Las fuerzas de seguridad de Kenia atacaron y violaron a civiles en los bastiones de la oposición después de las elecciones de agosto, declarò el grupo de derechos humanos Human Rights Watch (HRW). Aproximadamente la mitad de los incidentes denunciados a HRW fueron violaciones colectivas.
En un camino polvoriento y lleno de gente en los barrios marginales de Mathare, en la capital de Kenia, Nairobi, las casas hechas de barro y ramas son la casa de Mary Atieno (no es su nombre real). Ella recuerda el momento después de que los resultados de las elecciones se anunciaron en agosto, lo que declaró al actual presidente, Uhuru Kenyatta, ganador. Los resultados fueron impugnados por el líder opositor Raila Odinga. «Cuando se anunciaron los resultados fui testigo de cómo se quemaban las casas de las personas. El cuarto día después del anuncio oímos que los agentes de policía habían llegado a nuestra área. Corrí a la seguridad de mi casa y cerramos la puerta desde adentro», comentò al Deutsche Welle
Atieno es una de las sobrevivientes de la violencia sexual documentada por Human Rights Watch (HRW). La organización de derechos habló con unas 70 personas, incluidos tres hombres, que dicen haber sido violadas por las fuerzas de seguridad de Kenia.
El informe de HRW expone que «Ellos eran hombres de uniforme» y detalla que «la violencia sexual era generalizada contra mujeres y niñas, y los ataques sexuales contra hombres».
Las personas entrevistadas por HRW en las ciudades de Nairobi, Mathare, Kibera, Dandora, Kisumu y Bungoma describieron violaciones brutales en grupo con dos o más atacantes. Muchos dijeron que fueron violados vaginal y analmente, que fueron penetrados con objetos, o que se insertó suciedad en sus partes privadas.
La mayoría de las mujeres dijeron que fueron violadas por policías u hombres en uniforme; muchos de los cuales llevaban pistolas, porras, latas de gas lacrimógeno, látigos y llevaban cascos y otros equipos antidisturbios. Al menos una niña murió después de ser violada.
Muchos ataques también fueron acompañados por tortura y violencia contra los hijos y esposos de las mujeres.
Elecciones marcadas por la violencia
El impacto de la violencia sexual en los sobrevivientes es devastador «, dijo Agnes Odhiambo, investigadora principal de los derechos de las mujeres de HRW. «Casi todas las mujeres y niñas con las que hablamos sufrieron daños físicos y profundos traumas mentales y temían que sus atacantes nunca rindan cuentas».
El gobierno de Kenia ha ignorado durante mucho tiempo los crímenes sexuales relacionados con las elecciones y el sufrimiento de las víctimas, y se ha estimado que miles de mujeres y niñas fueron violadas durante la violencia política de 2007-2008, incluso por agentes de seguridad del estado, dijo HRW.
«Ahora me da mucho miedo la policía. Cuando veo a un policía, me escapo. Son peligrosos. Son crueles. Violan a mujeres y niñas, golpean a niños, ancianos, enfermos, mujeres embarazadas, todo por nada. Solo porque votamos «, dijo Rachel Owiti a HRW.
Fuente: Deutsche Welle
[Traducciòn, Muriel Balda Aspiazu]
[Fundaciòn Sur]
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