Human Right Watch ha pedido el día 26 de Julio al gobierno de Burundi que investigue y juzgue a los sospechosos de ser responsables de la cadena de asesinatos políticos que han tenido lugar en el país desde el año pasado.
Los asesinatos ocurrieron principalmente en la zona rural de la provincia de Buyumbura, un bastión del antes grupo rebelde, Fuerzas de Liberación Nacional, FNL, que entró a formar parte del gobierno, pero boicoteó las elecciones del año pasado, alegando que se había cometido fraude.
“Los miembros o ex miembros del FNL y sus familiares han sido el objetivo principal de estos asesinatos”, asegura el grupo HRW.
“En venganza, grupos de personas armadas sin identificar, han matado a miembros locales del partido en el gobierno, policía o agentes de inteligencia”, añade.
El último de esta cadena de asesinatos ha sido el 15 de julio, cuando un ex comandante rebelde, Audace Vianney Habonarugira, fue asesinado.
“El gobierno debe investigar estos asesinatos y juzgar a los responsables, sea cual sea su afiliación política”, señaló Daniel Bekele, director de HRW África.
“Es necesaria una acción urgente para detener esta espiral de violencia”.
La violencia hace temer el resurgimiento del conflicto de todos contra todos, en el pequeño país del África Central, devastado por una guerra civil entre 1993 y 2006, que se cobró la vida de unas 300.000 personas.
(IOL, 26-07-11)
