Discreto sobre sus vínculos con África, Alain Juppé está, no obstante, cortejado por numerosos países del continente africano que se anticipan a las elecciones presidenciales de 2017.
Entre los que han ido a llamar a la puerta del alcalde de Burdeos podemos citar, en particular al Presidente del Patronato de Benín, Sebastien Ajavon, candidato a las elecciones presidenciales del 28 de febrero en su país. Durante su exilio en Francia, el ex presidente de la Asamblea Nacional y el ex primer ministro de Hama Amadou de Níger, encarcelado desde su regreso a país, también ha tratado de contactar con Alain Juppé. Al igual que la centroafricana Anicet Georges Dologuele, diplomada por la Universidad de Burdeos en economía y gestión, ahora trabajando codo con codo con Faustin Archange Touadéra para la segunda ronda de las presidenciales, en febrero, de la República Centroafricana.
Por último, el principal opositor del presidente guineano Alpha Condé, Diallo en total desacuerdo con el Elíseo que apoya al actual jefe de Estado también ha tratado de conseguir una cita.
El eje Sarkozy-Ouattara
El ex ministro de Asuntos Exteriores de Nicolas Sarkozy y brazo derecho del gran «africano» que es Jacques Chirac, Alain Juppé conoce muy bien el sensible carácter de las relaciones entre Francia y África. De repente, el alcalde de Burdeos se muestra muy discreto sobre sus vínculos con el continente africano.
Este no es el caso de su potencial adversario para las primarias, Nicolas Sarkozy, que prepara, sin complejos, una gira por África el próximo verano. Uno de los destinos preferidos del ex jefe de Estado es Costa de Marfil, donde mantiene una larga amistad con la pareja presidencial Ouattara.
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