Un ejercicio militar marítimo internacional de cuatro días de duración cuyo código es Obangame Express 2012, comenzó el día 20 de febrero en el Golfo de Guinea.
Al ejercicio, que es albergado por Nigeria a través del comando naval oriental de la marina de Nigeria, asisten 12 países: Nigeria, Estados Unidos, Francia, Italia, España, Camerún, Ghana, Gabón, Guinea Ecuatorial, Santo Tomé y Príncipe, Togo, Benín y Congo Brazaville.
Cuatro buques de guerra de la marina de Nigeria han sido designados para ser parte del ejercicio mientras que se espera que las naciones participantes desplieguen sus propios buques de guerra y observadores. Además de los barcos de guerra, la marina de Nigeria también desplegará sus helicópteros mientras que la Fuerza del Aire de Nigeria desplegará un avión de patrulla marítima, MPA. Algunos otros buques de guerra nigerianos se destinarán cerca de la zona del ejercicio Obangame e intervendrán cuando se les pida hacerlo.
El oficial de bandera al mando, FOC, Usman Jibrin declaró a los periodistas en Calabar, el día 20 de febrero, que el “Obangame Express es un ejercicio de intervención marítima basado en escenarios simultáneos de los crímenes internacionales que más prevalecen en el mar. Las maniobras pretenden reforzar la capacidad de respuesta de las marinas del Golfo de Guinea. Están diseñadas para animar a los países de la región a mejorar la inter-operatividad de las comunicaciones y el intercambio de información en temas marítimos de concienciación con vistas a mantener los esfuerzos colectivos para combatir la piratería, el tráfico de seres humanos y otros delitos marítimos”.
Según él, “los objetivos estratégicos del ejercicio son garantizar la seguridad marítima a través de asociaciones internacionales militares a la vez que desarrollar la capacitación y motivación de los profesionales marítimos. Las naciones del África occidental y central pueden mejorar significativamente las inversiones internacionales si cooperan para proteger sus reservas de petróleo y las líneas de navegación”.
El Golfo de Guinea va desde Guinea Conakry, en la punta del África noroeste, hasta Angola, en el sur. Aunque la piratería en el Golfo de Guinea no es un problema de la magnitud del de Somalia, los analistas dicen que el aumento en el alcance y el número de ataques en la región, mal equipada para hacer frente a esta amenaza, podría afectar a la navegación y a las inversiones.
El almirante Jibrin, presidente del Comité Organizador Nacional del Obangame Express, lamentó que la “inseguridad generalizada en este medio marítimo cargado de recursos haya dado como resultado pérdidas financieras por valor de más de 2.000 millones de dólares, ha contenido significativamente la inversión y los prospectos económicos, ha aumentado el cromen y potencialmente tendrá consecuencias políticas adversas”. El oficial señaló que el medioambiente marítimo ha estado cada vez más amenazado por una miríada de retos de seguridad como la piratería, la pesca ilegal, el tráfico ilegal, el robo de petróleo, contrabando y otros delitos transnacionales. “los retos planteados por los crímenes cometidos en alta mar son tales que ninguna nación es capaz de combatirlos eficazmente ella sola. La situación requiere por tanto la sinergia de esfuerzos entre las fuerzas marítimas de las naciones para garantizar la seguridad del medio marino”.
(The Guardian, Nigeria, 21-02-12)