Los Emiratos Árabes Unidos han lanzado una nueva campaña para rescatar a Somalia de su difícil situación de catástrofe humanitaria, haciendo de la erradicación de la piratería y del terrorismo de al Shabaab uno de sus principales objetivos.
El país árabe ha participado durante cinco años en el intento de hacer que el fallido estado del este de África se convierta en un miembro activo y relevante de la comunidad regional. Las Fuerzas Armadas, y especialmente la Marina, han estado trabajando para desarrollar el servicio de guardacostas de Somalia, para que éste proteja a los pescadores del país y también a los petroleros extranjeros de la amenaza de la piratería. El año pasado, las FAS donaron carros de combate y otros equipos a la Seguridad Nacional y a la Agencia de Inteligencia de Somalia, además de iniciar programas de capacitación para las Fuerzas somalíes de Operaciones Especiales en misiones contra el terrorismo.
El jeque emiratí Abdullah bin Zayed, Ministro de Relaciones Exteriores, y el ministro somalí de defensa Hassan Hamud han firmado un acuerdo militar, que supera el presupuesto que ya se destinaba a la ayuda militar concedida a Somalia. Uno de los principales objetivos es el de estabilizar Somalia y preparar al país para inversiones mutuamente beneficiosas. Los Emiratos Árabes Unidos han llevado a cabo este esfuerzo a raíz de advertir las condiciones de Somalia como una amenaza potencial para la estabilidad de toda la región, ya que se trata actualmente de un hervidero de actividad criminal.
La piratería se ha visto reducida drásticamente en los últimos cinco años, gracias a los esfuerzos realizados, aunque todavía se continúa trabajando para hacer del país un aliado regional productivo.
Theodore Karasik
The National – Fundación Sur