PARIS — El jefe de la diplomacia francesa, Alain Juppé, cuya presencia no es deseada en Ruanda por Paul Kagame, ha denunciado vivamente el miércoles un informe ruandés de 2008, repleto, según él, de “mentiras e invenciones” sobre la implicación de Francia en el genocidio de 1994.
Ha subido un grado la tensión entre Alain Juppé y Paul Kagame. El ministro de exteriores francés ha denuncia las “mentiras” del informe Mucyo, que le acusa nominalmente de estar detrás de la organización del genocidio ruandés de 1994.
Recordemos que el informe Mucyo, hecho público en 2008, tenía por objeto dilucidar las responsabilidades de Francia en el genocidio y concluía con la denuncia de decenas de militares y hombres políticos franceses.
El informe apunta contra “Mitterand, Edouard Balladur, Hubert Védrine, Dominique de Villepin, François Léotard y contra mí mismo, es un amasijo de mentiras e invenciones”, ha lanzado Alain Juppé, que en la época era ministro de Asuntos Exteriores. Este documento, que data de 2008 y fue realizado por una comisión de investigación ruandesa, acusa a Francia de haber “participado” en el genocidio de 1994. Alain Juppé ha estimado que se trata de una réplica o contrafuego a “la instrucción judicial llevada a cabo en Francia” y “un día se conocerá la verdad histórica”.
“El Sr. Kagame ha dicho que yo no era el bienvenido en Ruanda. Le he contestado que no tenía la intención de ir y que en tanto siga circulando un informe que pone en cuestión el rol de Francia en 1994 no tengo la intención de manifestarme de manera visible”, ha declarado el ministro ante la comisión de asuntos exteriores de la Asamblea nacional francesa.
Alain Juppé ha afirmado que “no tenía intención de ir a Ruanda ni de saludar a Paul Kagame”, cuyas declaraciones críticas a primeros de abril causaron indignación en Paris. Paul Kagame había declarado que los ruandeses habían sido “insultados” por las tomas de posición de Alain Juppé en 1994.
(Le Figaro / Grandslacs.info, 05/05/2011)
Traducido por Ramón Arozarena.