Los jueces del principal tribunal para crímenes de guerra han reprendido a los fiscales del juicio contra el señor de guerra de la República Democrática del Congo, Thomas Lubanga, y están reconsiderando si liberarlo.
Los jueces de la Corte Penal Internacional, ICC, dicen que las pruebas se han retenido para que la defensa no dispusiera de ellas.
Lubanga fue detenido en 2006, acusado de reclutar y utilizar a niños soldado en la República Democrática del Congo, durante la brutal guerra civil que duró cinco años, terminando en 2003.
El caso será el primero en llegar a ser juzgado por el ICC. Estaba previsto que comenzase el 23 de junio, pero los jueces lo han pospuesto tras haber recibido las quejas de los abogados de la defensa que aseguran que los fiscales no les dejan acceder a los 200 documentos que presentarán como pruebas.
Entre estos documentos se incluye “un importante conjunto de evidencias exculpatorias”, según los jueces. “El proceso ha sido interrumpido hasta tal punto que ahora es imposible volver a poner juntar las piezas de los elementos que constituían un juicio justo”, aseguran los jueces en su comunicado.
Los jueces se reunirán el día 24 para decidir si Lubanga debe ser liberado y suspender el caso contra él.
El ICC, con sede en La Haya, fue establecido en 2002, como el primer tribunal permanente del mundo para crímenes de guerra. Fue diseñado para terminar con la necesidad de establecer tribunales ad hoc para cada caso de crímenes de guerra, como el de Yugoeslavia y el de Ruanda.
(Angola Press, 17-06-08)