El Gobierno angoleño ha decidido mantener la prohibición de importar cemento en 2016 en 15 provincias, con la finalidad de proteger la producción nacional, en un momento en el que el país posee capacidad para responder a esta demanda interna.
Esta decisión excluye a las provincias fronterizas de Cabinda, Cunene y Cuando Cubango, que continúan con una cuota excepcional de importación individual de 150 mil toneladas.
La decisión se justifica con la inversión realizada por el sector en los últimos años que permitió la producción anual de ocho millones de toneladas, valor por encima de las necesidades de Angola que, en 2014, fue de cinco millones de toneladas.
Angola es autosuficiente en la producción de cemento desde finales de 2014, momento en el que las cinco fábricas nacionales alcanzaron la cifra de ocho millones de toneladas, para un consumo de 5.022.000 toneladas en 2014.
El Gobierno angoleño justifica esta decisión con la necesidad de adoptar “medidas que pretendan reducir la importación innecesaria de cemento, defendiendo la producción y la industria nacional”, apoyando las posturas de la Comisión del Sector del Cemento y la Asociación de la Industria de Cemento de Angola (AICA).
Angola posee una comisión que fija y controla la cuota de importación de cemento, coordinada por el ministro de Construcción, Waldemar Pires, e integrada por los ministros de Economía, Comercio e Industria, como miembros fijos, y de Finanzas, como invitado.
En los últimos años, Angola multiplicó las inversiones en el sector del cemento, con el objetivo de activar la construcción civil en el país, tanto para obras públicas como para obras privadas.
CIF es la mayor fábrica de cemento, al frente de Nova Cimangola (Luanda), FCKS (Cuanza Sul), Secil (Benguela) y Cimenforte (Benguela)
Boletín Noticias Embajada de Angola
(Fundación Sur)
