El G8, las grandes potencias económicas, reunidos en Washington, se han comprometido a lanzar una “Nueva Alianza para la seguridad alimentaria y de la nutrición”, que permita en diez años hacer salir de la pobreza a 50 millones de personas, gracias a una asociación pública / privada. Esta “Nueva Alianza” ha sido presentada como algo que reforzará el papel de la Unión Africana y que sea responsable ante la población del continente.
La Alianza deberá trabajar con los ciudadanos, las cooperativas y las ONG. Los dirigentes del G8 han recibido con agrado, por otra parte, los progresos “notables” en el desarrollo de África.
La crisis financiera obliga. Los Estados Unidos y Europa ya no tienen los medios para mantener su nivel de financiación pública de la Ayuda al desarrollo.
Los países industrializados, cada vez tienen más dificultades para subvencionar su propia agricultura y debe encontrar una solución que aborde los dos problemas. Esto es lo que se puede sospechar que ha hecho la administración estadounidense lanzando la “Nueva Alianza para la seguridad alimentaria y de la nutrición”.
La Asociación público / privado prevista permite a Washington matar dos pájaros de un tiro. Las empresas privadas han aceptado hacerse cargo de 3 millones de dólares de inversión a lo largo de los próximos 10 años. Y estas mismas empresas están ofreciendo nuevas salidas en países en desarrollo que están experimentando un crecimiento importante.
En su declaración final, el G8 afirma que se mantienen los compromisos de L’Aquila [cumbre de Italia de 2009]. Según muchas ONG, la casi totalidad de los 22 millones de dólares prometidos en 2009 han sido liberados, y que hay buenas razones para pensar que este dinero va a ser distribuido rápidamente. Pero estas mismas ONG se in quietan al ver que el G8 se desinteresa, a partir de ahora, de la cuestión del hambre en el mundo. Una de estas organizaciones señala que los dirigentes de los 8 países más industrializados del mundo, no han debatido más que 35 minutos sobre este asunto.
Decepción de las ONG
Al término de la reunión, la mayor parte de las ONG que trabajan en el desarrollo y la seguridad alimentaria afirman estar decepcionadas. La asociación entre público y privado, bautizada como “Nueva Alianza para la seguridad alimentaria y la nutrición”, lanzada por Estados Unidos, y a la cual se han adherido los 8 países más industrializados del mundo, es una iniciativa interesante. Pero no se ha formalizado ningún compromiso para garantizar que los pequeños productores africanos no queden olvidados en este proyecto, como señala Henry Malumo, coordinador de África en Action Aid International.
(Journal Adjinakou, Benín, 21-05-12)