Un popular escritor francés de misterio, que está siendo juzgado por venta ilegal de armas a Angola, ha admitido haber recibido 300.000 euros de manos de los traficantes de armas, pero ha añadido que él sólo tenía un pequeño papel en la operación.
Paul Loup Sulitzer es una de las 42 personas que están acusadas de la venta de 790 millones de dólares en armas a Angola durante la guerra civil de este país, que terminó en 2002. Sulitzer, de 62 años, declaró ante el tribunal que recibió varios pagos a cambio de pasar información cuando los periodistas o escritores estaban prestando atención a Angola.
“Admito que tuve en mis manos en la masa, pero he pagado por ello”, declaró, refiriéndose a la sentencia de prisión suspendida de seis meses que obtuvo en un caso por separado, por no haber informado a las autoridades de impuestos sobre los pagos.
Los fiscales creen que dos figures clave, Pierre Falcone, un empresario francés, y Arkadi Haydamak, un multimillonario ruso-israelí, establecieron una gran red para ayudarles a vender armamento a Angola desafiando el embargo de las Naciones Unidas.
Sulitzer contó que Falcone le remitía dinero a cuentas en el extranjero o le daba fajos de billetes en metálico. Ha negado las acusaciones de que había tenido un papel más importante en las ventas de armas, y añadió que las acciones legales contra él estaban completamente desproporcionadas por el crimen que él había cometido.
(African News Agency, 10-12-08)