Las estadísticas publicadas por el Banco Central de Liberia muestran que son más los millones de dólares americanos que salen del país, de los que entran, al contrario de los que se creía, que las remesas del extranjero suponían una parte importante del producto interior bruto del país.
El boletín oficial del Banco Central de Liberia, que recogen datos del periodo de entre octubre y diciembre de 2008, desvelan que salen del país 37 millones de dólares más de los que entran.
El Banco asegura que durante estos tres meses revisados ha registrado un total de entradas (el dinero que envían los familiares desde el extranjero) de 210.7 millones, mientras que las salidas (el dinero que es trasferido fuera del país) durante el mismo periodo es de 247.7 millones de dólares. Estas cifras sugieren que del país han salido en tres meses al menos 37 millones.
El Banco Central demuestra así que el dinero que entra en el país ha descendido en 44.6 millones, mientras que el que sale del país ha aumentado en 8 millones, comparando estos datos con los del trimestre de entre julio y septiembre de 2008, en el que se registraron entradas por valor de 255.3 millones.
Durante 2008, las remesas de los trabajadores del extranjero han mostrado y declive constante, debido en gran medida a la actual crisis financiera que afecta a países como Estados Unidos y Gran Bretaña. Esta tendencia ha continuado durante enero y febrero de 2009.
En enero de 2009, las remesas ingresadas en Liberia desde el exterior sumaron 69.3 millones, mientras que el dinero enviado hacia afuera del país, durante el mismo periodo, ascendió a 79.2 millones de dólares, lo cual significa que en enero de este año han salido del país 9 millones de dólares. Con estos mismos cálculos, en febrero han salido del país 6.5 millones de dólares.
El director del departamento de Investigación, políticas y planificación del Banco, Richard Dorley, asegura que estos son los efectos de la crisis global. Además, añadió que la salida de capital de Liberia no es sólo debida a los particulares, sino también a las empresas, especialmente bancos y compañías privadas.
Explicó que la reducción de las remesas muestra las dificultades a las que se están enfrentando los familiares en el extranjero para ganar y enviar dinero a sus casas, debido a la falta de trabajo o a otros factores asociados a la crisis global.
(New Democrat, Liberia, 12-05-09)