La policía de una ciudad de Túnez ha utilizado gas lacrimógeno el día 19 de diciembre para dispersar a cientos de jóvenes que estaban rompiendo escaparates y coches.
No hay comentarios oficiales desde Túnez sobre estos disturbios. Las manifestaciones son algo muy raro en Túnez, un país del norte de África con casi 10 millones de habitantes, que es uno de los más prósperos y estables de la región.
Testigos afirman que varios centenares de jóvenes se dieron cita en la ciudad de Sidi Bouzid, unos 200 kilómetros al sur de la capital, Túnez, el día 18 por la tarde para manifestar su enfado por un incidente con un joven, Mohamed Bouazizi, que se había prendido fuego a sí mismo en señal de protesta después de que la policía se confiscase la fruta y verdura que estaba vendiendo en un puesto callejero, según los testigos.
“Los violentos enfrentamientos terminaron que el arresto de decenas de personas”, declaró un testigo, que quiso permanecer en el anonimato, “Han roto escaparates y coches y la policía ha lanzado gas lacrimógeno”.
Otro testigo, un familiar del hombre que se prendió fuego, dijo que los disturbios han continuado al día siguiente, el domingo día 19. “La gente está enfadada por el caso de Mohamed y el aumento del desempleo en la región”, explicó, “las autoridades locales han prometido intervenir”.
Bouazizi está en estado grave y ha sido trasladado al hospital de la capital.
Una grabación colgada en la red social de Facebook, muestra a varios centenares de manifestantes a las puertas de la sede del gobierno regional, con líneas de policías bloqueándoles, para impedir que se acercasen más al edificio, pero no se puede ver ninguna violencia.
Los testigos añaden que fueron enviadas a la ciudad de Sidi Bouzid cientos de soldados extras para unirse a las fuerzas de seguridad, el domingo, y que las calles están llenas de ellos.
(News 24, 20-12-10)