Costa de Marfil ha celebrado el 6 de febrero, al igual que los demás países del mundo, el Día Mundial contra La Mutilación Genital Femenina (MGF), que forma parte de la violencia de género (VBG).
“La escisión” es la forma de Mutilación Genital Femenina (MGF) más practicada en nuestro país. Implica la extirpación parcial o total de los genitales externos de la mujer o la niña. Es una práctica tanto perjudicial como nefasta para la vitalidad y la salud de ellas.
Para celebrar este día, el Gobierno desea reiterar a todos los estratos de la población, donde quiera que estén, su firme compromiso de poner fin a la práctica de la circuncisión femenina y otras formas de MGF.
Este fenómeno que implica un grave ataque a la integridad corporal grave carece de fundamento y, por desgracia se practica en muchas partes de nuestro país.
Según la Encuesta de Demografía y Salud de 2012, el 38% de las mujeres entre 15 años y 45 han sido mutiladas con una tasa superior a:
– 70% en el norte y noroeste,
– 57% en el Oeste,
– 50% en el centro-norte,
– 21% en el Nordeste,
– 20% en la región centro-este y finalmente
– 13% en el centro.
Estas cifras nos desafían y nos llevan a reflexionar sobre la urgencia de poner en práctica, con todo su rigor, la Ley Nº 98-757 del 23 de diciembre de 1998, que penaliza la circuncisión femenina.
Los estudios sobre el tema, muestran que los factores determinantes de la persistencia de esta práctica, de la circuncisión femenina, en Costa de Marfil, son de orden socio-cultural y religiosa.
Según las fuentes, la práctica se hace generalmente en dudosas condiciones de higiene y causa efectos, a veces irreparables, sobre las víctimas, incluyendo la muerte.
Según estas mismas fuentes las consecuencias incluyen el riesgo de infección por el VIH, el origen obstétrico FVV y muchos otros relacionados con la salud reproductiva y sexual.
A pesar de los esfuerzos del gobierno en la sensibilización sobre este dramático tema, los actores involucrados en la lucha y el compromiso de las Primeras Damas de África, el fenómeno parece seguir persistiendo.
La sinergia de los actores estatales, el activismo de las organizaciones de la sociedad civil y el apoyo continuo de los socios internacionales de desarrollo, han impedido que muchas de estas ceremonias de circuncisión se lleven a cabo y haya 7 casos de condenas.
La activación de todos los sistemas de alerta y de prevención en todo el territorio nacional, son un freno a la realización de estas ceremonias de circuncisión.
Sin embargo, hay que reconocer que algunas comunidades siguen practicando este acto plausible de enjuiciamiento, en la clandestinidad.
La escisión representa un abuso sexual y la violación de los derechos humanos. Nada puede justificar esta práctica.
Por lo tanto, hago un llamamiento a la vigilancia de todos los interesados en la lucha contra la mutilación genital femenina y aliento su denuncia.
Insto a los poderes judiciales a que hagan conocer la ley y la apliquen de forma más rigurosa.
En su artículo Nº 2 de la Ley Nº 98-757 del 23 de diciembre de 1998, se estipula:
«todo aquel que cometa un MGF será castigado con una pena de prisión de 1 a 5 años y una multa de 360.000 a 2.000.000 de F CFA. La pena se duplicará si el autor del acto pertenece al cuerpo médico o paramédico. El juez también podrá prohibirle el ejercicio de su profesión a partir de ese momento. La pena es de prisión de 5 a 20 años en caso de muerte de la víctima».
Queridos compatriotas,
la voluntad del Estado, en la lucha contra la mutilación genital femenina, pone a todos los participante dentro de su responsabilidad, tanto desde el ámbito de la legislación, la justicia, la administración pública, la sociedad civil, líderes comunitarios, líderes religiosos u Organizaciones no Gubernamentales …
Con este fin, una Estrategia Nacional de lucha contra la violencia de género fue adoptado en 2014 por el Gobierno, para garantizar la prevención, reforzar la protección de las víctimas y castigar a los autores y patrocinadores de la escisión en nuestro país.
Es en este contexto que, en diciembre de 2014, establecimos dos redes comunitarias en las regiones occidentales y las regiones del Centro:
– 100 mujeres líderes contra la MGF en las montañas del distrito;
– 50 líderes comunitarios comprometidos hombres contra la violencia sexual en la región Gbeke.
Además, querríamos expresar nuestra gratitud infinita a profesionales de los medios de comunicación, las ONG internacionales y nacionales y todas las personas e instituciones que nos acompañan, con determinación, en la lucha incansable contra este flagelo.
Queridos compatriotas,
Ha llegado el momento de actuar:
«CERO TOLERANCIA EN LA MUTILACIÓN GENITAL FEMENINA EN COSTA DE MARFIL».
GRACIAS
Anne Desiree Ouloto
Ministra de solidaridad, familia, mujer y niños
[Fuente: news.abidjan.net-Fundación Sur]