Estas cifras fueron hechas públicas en la presentación de la memoria anual de Cáritas, que tuvo lugar el pasado 16 de noviembre, a cargo del Presidente de la Organización, Rafael del Río Sendino, y el Secretario General, Silverio Agea.
Los dos directivos coincidieron en destacar que este año, la Institución ha alcanzado el rendimiento más alto de toda su historia, aunque como puntualizó Rafael del Río, “falta mucho para alcanzar nuestro objetivo principal, lograr la justicia y la igualdad de derechos humanos”. También ambos señalaron la importancia de realizar este ejercicio de transparencia, al que Cáritas siempre ha concedido una importancia primordial, la presentación pública de las cuentas, y el destino de los fondos tanto públicos como privados, de la Institución católica.
Cáritas ha aumentado durante 2006 el número de voluntarios, de diócesis, y de recursos, además de las personas a las que ha llegado su asistencia.
Los fondos destinados al ámbito internacional son los más altos que jamás haya manejado la organización. Su Secretario General señala que este enorme crecimiento ha sido gracias a la recaudación que se hizo cuando ocurrió la catástrofe del Tsunami. El total de dinero destinado al ámbito internacional es de 184.500.000 de euros. También destacó el incremento que ha tenido la atención a personas inmigrantes dentro de nuestras fronteras, un sector que ha aumentado un 25 % con respecto al año anterior.
Entre Ayuda de emergencia, Proyectos de Desarrollo y Ayuda humanitaria, a África han ido a parar cerca de cuatro millones y medio de euros. Se ha destinado a ayuda de emergencia a Chad, Kenia y la República Democrática del Congo más de 590 millones de euros y a la ayuda humanitaria en Sudán, República Democrática del Congo y Ruanda, 1.157 millones de euros. Además, Cáritas destaca los proyectos de desarrollo en Angola, Eritrea y Etiopía, a los que ha destinado más de 2.500 millones de euros.
Silverio Agea reiteró varias veces su petición a los medios de comunicación para que transmitan mensajes responsables, que no inciten al racismo y a la xenofobia en nuestra sociedad. Calificó de “terrible” que en los centros de acogida de Cáritas se están dando casos de violencia racista, porque los “empobrecidos” compiten por los recursos. Agea atribuyó cierta responsabilidad a los medios de comunicación a la hora de transmitir la existencia del verdadero problema: “El verdadero problema es la escasez de recursos, no el color de la piel de quien los necesita”, concluyó.
Rosa Moro. FunSur, 16 de noviembre de 2007