Los políticos argelinos han acordado quitar el límite a la duración de las legislaturas presidenciales, una decisión considerada por los partidos de la oposición como una manera de pavimentar el camino para que Abdelaziz Bouteflika permanezca en el cargo para el resto de su vida.
Una reunión conjunta de la Asamblea Nacional de Argelia y el Senado votó con 500, de 529, votos a favor de adoptar cinco cambios a la constitución. 28 votos fueron en contra y una abstención.
Aunque Bouteflika no se ha comprometido a presentarse para otra legislatura, se espera que se presente a las elecciones presidenciales de abril de 2009, para intentar la ampliación de su permanencia en el cargo por una tercera legislatura.
Riquezas energéticas
Los partidarios de Bouteflika aseguran que es el mejor preparado para continuar con la reconstrucción de Argelia, que sufrió una guerra civil en los años 90. Más de 150.000 personas murieron durante el conflicto.
Los políticos de la oposición se unieron en contra de hacer los cambios a la constitución, alegando que la oficina presidencial ya tenía demasiado control sobre los tribunales y la legislatura.
Argelia es un miembro influente de la Organización de Países Exportadores de Petróleo, OPEC, y es el mayor exportador de gas de África. Alrededor del 20 % de las importaciones de gas de Europa vienen de Argelia.
El gobierno de Argelia se enfrenta a los combatientes de Al Qaeda en el Magreb islámico, el ala de Al Qaeda del norte de África.
Al Qaeda ha sido acusada de varios ataques bomba y disparos en los últimos años en Argelia.
Aunque Argelia es la tercera economía de África, el gobierno ha sido criticado por no haber mejorado las vidas de la mayoría de los argelinos, a pesar de los enormes beneficios obtenidos por el petróleo.
Los aliados políticos de Bouteflika han pedido al presidente que se presente a la siguiente legislatura porque consideran que es el único candidato que posee la preparación necesaria y el peso internacional para presidir el país.
Bouteflika no sometió a referéndum los cambios a la constitución alegando que cualquier alteración no cambiará el sistema básico de poder político.
Pero algunos analistas aseguran que los argelinos están molestos con que se cambie la constitución sin la aprobación popular.
A gran escala, los cambios a la constitución no alterarán la percepción entre los argelinos de a pie, de que la élite política está ignorando sus necesidades, según algunos comentaristas.
(Aljazeera, 13-11-08)