Por Avidge
Mucho se ha hablado, escrito y comentado sobre el caso del Centro Cultural de Rebola (CCR). Actuaciones que vienen siendo habitual en el régimen de alegre memoria, pero que sin embargo aprovechan ciertas personas para fomentar el odio entre los Bubis y los Fangs y, de paso, poner a todas las etnias que pueblan nuestro país contra la etnia fang, mayoritaria en Guinea Ecuatorial. Apología que tanto algunos que dicen ser políticos como los que no, ya vienen haciendo uso hace tiempo a través de sus artículos y comentarios.
Que el régimen atente contra las libertades no es extraño, por esto es una dictadura y para esto está la dictadura si no, no se llamaría como tal.
Que Obiang Nguema sea de la etnia fang no significa que todos los fangs sean y actúan como él.
Que Obiang Nguema sea del distrito Mongomo no quiere decir que todos los de allí sean como él.
Que Obiang Nguema sea de la tribu Esangui no es excusa para arremeterse contra todos los que son de esta tribu.
Ergo aquí que si seguimos pensando como tal no habría diferencia entre la forma de actuar del dictador y cualquier persona que se presume ser democrático.
No me preocupa mucho los comentarios que hacen la gente que no se dedican a la cosa pública, me preocupa que ante estas situaciones, algunos políticos, partidos, movimientos o asociaciones no emitan un comunicado condenando el comportamiento de ciertos individuos que intentan aprovechar las actuaciones del régimen que nos malgobierna para crear el odio entre los bubis y los fangs.
Echo de menos que al igual que el Secretario General de Cpds, Andres Esono, es capaz de denunciar las atrocidades cometidos por el régimen de Macías contra el pueblo bubi siendo un fang, un líder de otra etnia sea capaz de hacer lo mismo denunciando las atrocidades de, por citar un ejemplo, los hechos acaecidos en Evinayong en 1976 cuando unos valientes hijos de este distrito, con apenas veinticinco años, fueron capaces de enfrentarse a este régimen y como represalia, el régimen quemó pueblos enteros en Evinayong, torturó y acentuó los asesinatos que ya venía cometiendo contra este distrito, violó a las mujeres, saqueó todos los bienes muebles de este distrito, ¿acaso no son fangs?. Este odio contra este distrito sigue vivo hoy en día(cuna de los micuá, por ser distrito de Ondo Edu).
Si miramos el número de asesinados que ha habido en Guinea Ecuatorial, veremos que la mayoría son de la etnia fang, evidentemente al ser la mayoría étnica, los regímenes de Mesie Nguema y su sobrino Obiang Nguema, se han cebado contra esta etnia (fang), siendo de la misma ellos, entonces, ¿cómo es que siendo ellos de la etnia fang son con los que más se han cebado los dictadores de alegre y triste memoria?.
El baile de los mokom, en Malabo, el baile de los malditos, en Bata, acabaron el acervo guineano simplemente porque sí, para mermar a este país y dejarlo flotanto sobre las inundaciones tal como esa hoy en día. Allí no hubo distinción de etnias y es por esto que todas ellas tienen que hacer frente a esta oclocracia sin oportunismos ni victimismos porque víctima somos todos.
Mi compañero de lucha Sir Lucky Dube dijo en su programa de radio, que “el problema es de relato“. No vayamos por las ramas intentando contar falsedades y mentiras. Según Sir Lucky Dube,” tenemos que contar las cosas, la historia tal cual sucedieron las cosas” (y añado) tal cual suceden y seguirán sucediendo. Querer culpar a una cierta etnia de los males de Guinea porque sea mayoritaria y porque Obiang, desgraciadamente, pertenezca a ella, no me parece lo más razonable. Dejad de juzgar en masa a la gente. Dejad de actuar como actúa Obiang, que encarcela o mata a familias (niños incluidos) cuando no ha podido hacerlo con un miembro de una familia que se ha escapado de sus garras, empieza a encarcelar, torturar y asesinar a toda familia de esta persona. Juicio en masa es lo que hacen muchos cuando señalan a todos los fang como culpables de los males que acaecen en nuestro país. Una caza de brujas y una apología contra toda una etnia que también ha sufrido y sigue sufriendo las mismas consecuencias, o peor.
El régimen de Obiang es un régimen de tumulto, del desorden, de la irracionalidad, de la incompetencia y de la degradación del ejercicio del mando político. Es “el gobierno impuro y abusivo de la turba, o sea, de la muchedumbre extraviada, violenta y desordenada”, como lo definiera el historiador griego Polibio. Esta multitud extraviada y desordenada está compuesta de hombres y mujeres de todas las etnias que conforman nuestro país. Una multitud que ha conformsdo un sistema, un conjunto ordenado de normas y procedimientos que regulan el funcionamiento de un grupo o colectividad. Qué importa que los fang sean la mayoría que constituyen este entramado de oportunistas si es que el grupo está distribuido de forma proporcional?. Que la dictadura esté conformado solo por la etnia fang, sería otra cosa. Es que ahí están todos y siempre han estado todos. La mayoría de los fangs, bubis, ndowes, fernandinos, bisios,ect. estamos en contra de esta forma de llevar el país. El problema no es étnico, siquiera distrital. El problema de Guinea Ecuatorial tiene nombre y apellidos, es ahí donde tenemos que luchar todos, y no” irse por los cerros de Úbeda” porque esta forma de actuar de algunos políticos hace que el régimen siga “teniendo cancha” para rato.
Dijo Karl Marx que los hombres hacen su propia historia, pero no la hacen a su libre arbitrio, bajo circunstancias elegidas por ellos mismos, sino bajo aquellas circunstancias con que se encuentran directamente, que existen y las han sido legadas por el pasado. La tradición de todas las generaciones muertas oprime como una pesadilla el cerebro de los vivos. La lucha contra la dictadura tiene que ser una lucha de todos los guineoecuatorianos, una lucha del deber. Un deber a las generaciones muertas y un deber a las generaciones futuras. Es nuestra responsabilidad, la generación actual, de no permitir que otro listillo como Obiang venga a colarse en la presidencia de este país. Un listillo que aprovechó que sus compañeros fueran al frente de batalla mientras se escondía en Malabo para escaparse en caso de fracasar el golpe de estado, a pesar de ser actor principal de las causas que llevaron a esta rebelión militar. Un golpe donde estuvieron bubis como Eulogio Oyo (aunque luego le salvaría a Obiang chivándole de su posterior detención,) muchísimos fangs como Hipólito Osa, Ela Nseng, Felix Mba Nchama,etc. hoy en día en el olvido, muertos o en el ostracismo.
Tenemos que actuar, todos juntos, contra esta lacra. Tenemos que denunciar (todas las etnias) los atropellos de la dictadura, los haga donde los haga y contra quienes los haga como lo he hemos hecho con CCR. Trabajemos por una Guinea de todos.
Como los guineoecuatorianos nos hemos vuelto frívolos e interesados, hablamos y decimos todo tipo de laceraciones étnicas, como se ha visto en los comentarios de los artículos escritos sobre el caso CCR sin importarnos de las familias que han perdido a uno dos o más miembros de su familia por estos regímenes ,familias la mayoría de ellas de la etnia fang. ¿Qué pasa cuando un “etnófobo” suelta toda su artillería contra una cierta etnia porque el dictador sea de esta etnia sin tener en cuenta que hay familias que son víctimas de esta dictadura?, Parecen que estas familias no cuentan, clarooo, al ser de la etnia fang, dejan de ser víctimas verdad?, no puede ser. Esto es dejarles entre la espada y la pared. Señoras y señores, como he dicho antes, no me preocupa la persona o personas que lanzan improperios contra una u otra etnia, me preocupa que pseudo-políticos se escondan bajo la manta del victimismo y “etnifobia” para su provecho político. Si queremos vencer a esta dictadura, todos tenemos que ir de la mano. Frente al oclocracia y oportunismo político, orden, racionalidad, competencia, responsabilidad, colectividad y suma blancura.
Origuimal en : Radio Macuto
